martes, 8 de diciembre de 2009

jueves, 3 de diciembre de 2009

DEJÁ VÚ ...

Escribe JORGE CROSA

Ante el resultado del sorteo más digitado e indignante de la historia en el fútbol de la FIFA, nuestro compañero Atilio Garrido se enoja.
“Tenés razón, Atilio, pero marchás preso”. Allá no se tiene en cuenta nada. Ni los campeonatos del mundo, ni los Juegos Olímpicos, ni las notables conquistas celestes, ni nada. Acaso, tampoco el “savoir faire” que quedó desairado, de los franchutes digo, siendo campeón del mundo, también.
Es una cuestión política, prolijamente desordenada por los que mandan en el mundo de la pelota y no nos dan pelota. Esa es la verdad. No hay otra. No existimos para ésta gente. Desde hace mucho tiempo no somos nada para ellos, ni representamos tampoco nada.
Sin embargo, Sudamérica lleva la ventaja en los títulos mundiales, (gracias Brasil) y además, eso no lo pueden ocultar con una farsa, con ese burlesco que fue el sorteo, que más bien se pareció a una vieja quermese de la escuela, en la que se ganaba un envase de garrapiñada …
“’Tamo, frito, flaco”. Vulgo: “no da pa’calentarse”. Son los dueños de la pelota y si mañana la quieren cuadrada, pues jugaremos con pelotas cuadradas. Listo.
Mandan ellos. Los vivos de la película. Los que se llevan la mosca. Los que manipulan a clubes, jugadores, campeonatos, sedes y todo lo que se te ocurra, con tal de salir con bien del asunto. Con bien, es decir, bien de euros para las arcas de los dueños de la globa y sus colaboradores.
Y como nadie “patea” …
Mirá, saliste vos, alguno más por ahí, yo que acompaño con todo, porque siempre me pareció un robo lo que hacen estos mozos, pero en las reuniones, todo el mundo, a chupar, comer y pedir salir en la foto, con la sonrisa más lindo al lado de Blatter. No sea cosa de no tenerla esa foto, ¡vive Dios!
Alcahuetes, amanueneses, correveidile y demás son tantos que, al final, doblegan al buen pastor. Al escriba. A la gente bien. Al que tiene razón. Te quieren hacer callar y te traban por todos lados. Y son los capos. Ta. Ellos dicen que el hombre no llegó a la Luna y será así. Son los propietarios de tu gloria, de tu vida futbolística, ¿ me explico?
¿ Qué, querías a Uruguay, cabeza de serie por ser campeón del mundo y porque están todos los que fueron una vez los mejores del planeta?
No te equivocaste. Era una muy buena oportunidad de demostrar sanidad y correspondencia de parte de la FIFA.
Pero, pecaste de ingenuo, bueno, por esta vez, por lo menos. Son grandes prestidigitadores. Con una sonrisa, de palo a palo, te engañan y te saludan, eso sí, con una copita de champagne al lado, no sea cosa que hablés que fuiste mal atendido.
“Ya sé, no me digás, tenés razón, la vida es una herida absurda y es todo, todo tan fugaz, que es una curda, nada más, mi confesión”, dijo el grande de Cátulo Castillo.
Vulgo II: “ Nos pasaron pa’ la cueva”. Previsible. Inentendible. Hurto fino, ingeniosamente creativos estos chicos de la FIFA. Los “Rififi” del fútbol, como la famosa película de Jules Dassin. Elegantes, con clase, con plata, con talento, con mando. Una secta ganadora de palo a palo.
¿ Y vos te enojás, Atilio? Es para que se enoje el mundo, mi viejo. Pero, a muchos les falta el “peso de la historia”, que se lleva con uno, entre las gambas.
Los “Rififi” de la FIFA siguen sonriendo para las cámaras, nadie dice no, nadie dice sí, nadie dice nada, eso es lo peor y más grave.
Dejan hacer. Total, ¿ les van a dar razón a periodistas como vos, o como yo, surgidos de la tierra de los cuatro veces campeones del mundo, como los uruguayos?
¿Qué fuimos y seremos, no sé mañana, pero hasta hoy, los más increíbles ganadores del mundo, cito Maracaná 1950, aunque algunos digan “que nos hizo mal” ser los campeones de ese torneo?
Ah …. Porque los Juegos Olímpicos, van computados como Campeonatos Mundiales, al no existir, hasta el 1930, aquí en el rancho, un campeonato del mundo.
Bueno. ¿ Elegiste el cuartito? … No. No vale la pena, ni llorar. Es como si lo hubiésemos vivido … quizás, hasta ya lo sabíamos … es la paramnesia, viejo.
Déjá vú, Atilio, déjá vú …

lunes, 30 de noviembre de 2009

ES LA MONEDA ...

Escribe JORGE CROSA

Analizar, antes, un clásico, es como el estudio diario de la Luna. Siempre aparecen cosas diferentes. Hoy agua, mañana un mineral, pasado algo que pudo, en el tiempo, indicarnos qué pasó con la “romántica”, hasta el 69. Después la pisaron los norteamericanos.
Bien. ¿Quién gana, no? Advertencia: como siempre, opiniones de todo tipo entran en la olla. Pónganle de todo al puchero. (queda más rico). Todos hablan, todos saben, antes. El estadio que brama. Los gritos estereotipados de toda la vida. Ninguna novedad visible o cantable. Cantos conocidos.
Y la espera que consume termos, hace transpirar y pensar en el chiste para la semana, en caso de ganar.
Un clásico es como una conquista amorosa. Uno arranca bien con una frase, bien pensada, calibrada al máximo. La respuesta es una negativa absoluta. Mutis y por el foro. Adiós ilusión. Se fue la percanta. “Le erré”, pensás. De repente, la equivocada es ella. ¿ Puede ser, no?. El clásico lo pensás, lo trabajás en la cabecita y al final, chau flaco. Te desarman a los tres minutos. Un penal, un gol “de mentira”, un pifia, un error abajo, una pelota mal jugada, una jugada de “muchíiiiisima suerte” te tira al piso y es bravo recuperarse. Así son, con 50.000 locos gritando “pa’un lado y pa’l otro”.
Púa viene como potrillo “3 años”, rumbo a la Polla. No perdió el hombre. No quiere perder. ¿ Quien quiere esa manzana en mal estado, vamos?
Acevedo ha logrado un conjunto sólido, con buenos rendimientos, levantó al grupo que venía regular hacia abajo. Hay elecciones por esos pagos. Influyen. Todo influye. Hasta el mate frío te complica.
El “Pollo”, Pacheco, Alonso, De los Santos, Ramis … son vitales. Peñarol llega invicto con Púa. Incide.
Lodeiro, Vera, Oscar Morales, están en un gran momento.
Los trico llevan 27 pinitos en su haber y 9 en contra. Sólo uno menos que Wanderers que es el que tiene menos goles en contra. Liverpool lo iguala con 27.
Los peña perdieron uno, pero empataron cinco. Nacional no empató y pero perdió dos.
¿ Vio? Entreverados , “como piolín en bolsillo” … Es el clásico. Si digo gano el que le toque, no agrego nada, lo han dicho miles antes que yo.
¿ Y si me la juego y pierdo, qué pasa? A ver … medio campo, parejos, abajo también, recuperación de pelota, leve ventaja tricolor, llegadas, acaso Peñarol, media distancia, parejitos. Figuras, los dos tienen buenos valores. Si es por goles, Nacional.
¿ La suerte, juega? Sí. Ni le hablo de esguinces, desgarros, tirones, ahogos, cabezazos sin querer, “pata demasiado fuerte”, “pisotón quebrador…” (sin querer …)
El asunto arranca para un empate, por el invicto de Peñarol con Púa y su confianza en lo que arma. En Acevedo que sabe lo que tiene entre manos y lo ejecuta.
Es que, salvo excepciones, que las hubo, los clásicos siempre arrancan así, como para empate. Salvo desniveles formidables como la época de Artime, Sanfilippo, Morena, Hohberg, Míguez, otro tiempo, el mismo estadio, la misma pasión.
El clásico, ¿ sabe lo que es? … la moneda que tira al viento el juez y te dice que arco elegís. Mucho de suerte. Un enorme carga de fortuna. En definitiva, la moneda es la misma para los dos.Gira, gira, la destapa el juez y señala : “usted elige …”. La moneda, mira vos, es el clásico. Una aventura con la suerte. Eso es.
¿Pronóstico? (lea líneas arriba por si se olvidó).
O consulte a Horangel.

sábado, 28 de noviembre de 2009

EL AUTOR DE NUESTRO TIEMPO

Escribe JORGE CROSA

¿Sabe lo que importa? Ir al mundial. ¿ Qué cómo llegué? ¿A quién le importa? Acaso a los mismos desconformes de siempre, a los que se enfadan , de repente, porque estamos en Sudáfrica. Ellos que siempre criticaron al técnico, a los jugadores, a la organización, a los que están en derredor, para ellos, todos en falta, todos con algo escondido, siempre “sucios”, nunca limpios. Que la Mutual, que los sueldos, que la AUF, que los campeonatos, aquellos que inventan “borocotós” de cualquier cosa porque no les alcanza el fútbol y enfilan hacia el “show business”, para hablar nomás, que le deben a mengano, que hubo plata por medio para tal o cual operación ilícita.
Estamos en el mundial. A muchos les duele. No saben lo que decir. Ni lo que escribir, (en caso que sepan hacerlo, esto es, juntar letras con algún sentido). Pero no, no los he visto, porque eso se llama, por lo menos, ser informador. No periodista. No se confunda. Acá se le denomina periodista a cualquiera. Por años, por apellido, por amistad, por lo que se le ocurra, es periodista el fulano. No es así. De allí que, lamentablemente, cuando te levantás y te enterás que le pasa tal o cual cosa a un periodista de verdad, te da bronca, porque la injusticia se instaló, aunque brevemente, en alguien que no tiene nada que ver y cumple con su tarea como debe ser.
Ir al mundial. Para nosotros, una proeza, tal cual estábamos. Para los “sabihondos”, con esa “ sabihondez trucha” en la que han vivido y viven, algo normal y discutible, aún. Por ejemplo: ¿ Y ahora, qué van a hacer? ¿ Renuncia Tabárez? ¿ Va a citar a los mismos? ¡ Por favor, a sufrir de nuevo!.
Nada les viene bien. Claro. Tienen lugares donde aparecen, donde escriben (bueno donde juntan letras), hablan y todo, entonces, son periodistas (¿).
Calidad, jerarquía, técnica de acción, historia de los hechos, presentes intuídos, claridad conceptual … ¿ qué es eso?, preguntaron los “sabihondos”.
No lo saben. No les enseñaron. Pero se maquillan. Eso sí. Se maquillan. Se sientan, la computadora los mira, ellos tratan de responder, unen letras, creen saber …
Es snob criticar. Critiquemos. Es snob “hacerle el equipo al técnico”. A ver … infografía del seleccionado.
Nada de esto que lee es así. Un periodista es algo muchísimo más importante que, con respeto, aquel dúo fantástico de los carnavales uruguayos, “Yo kiero dormir con mama”, Cortés y Fernández o los Capablanca. Ellos tenían la misión de hacer sonreír y lo lograron.
El periodista tiene la misión de informar, de opinar y ser honesto consigo mismo. El autor de nuestro tiempo. Ese es un periodista.
Cuando lo logren, opinen porque tienen el motivo de guiar a nuestra gente.
Mientras tanto, mientras eso no suceda, mientras la sangre no hierva ante la injusticia y se vendan al primer, segundo o tercer ofertante, vayan y sí, sin problemas, maquíllense. Total, es una actuación, nada más.
Una farsa. Sepan que no son periodistas, claro. Que son integrantes de un género, creado por Richelieu, para acompañar a su repertorio. Las famosas turlupinadas.
La base de un teatro cómico. Que de eso no se trata el periodismo. Ahhh y me olvidaba … “los que que creen que saben porque los años, porque las canas, porque la vida …”todo fiasco. El que no sabe, no sabe. Así pasen siglos. Ahora si se la creen, allá ellos.
Quizás, engañen, sin saberlo, les doy ese beneficio de la duda, con sus farsas, ideas y elementos siempre rutinarios y recurrentes.
Muchas veces, con la farsa (no con el periodismo, por supuesto), se consigue un gran humorismo.
Es lo que son. Bueno, a maquillarse, ya es tiempo.
Pero la juventud debe saber que “ésos” no son periodistas. Nunca lo fueron, ni lo serán.

jueves, 26 de noviembre de 2009

¿ES TAN DIFICIL ...?

Escribe JORGE CROSA

Veamoslo así.
Clasificados para el mundial. Hay que gestionar partidos para la selección. Como dicen los jóvenes : obvio. Además de las fechas FIFA, encontrar otros, con carácter de grave y urgente. ¿ Por qué? Porque se hace necesaria la comunicación plena entre los futbolistas y porque es así que se prepara para un mundial. No es novedad, aunque, nos hayamos olvidado un poquito. Hace tanto que no vamos, ¿ no?.
La competencia es fundamental. Y no importa, con profundo respeto por quienes discrepan, con la dirección de la selección, creo que ya pasó el momento. Si Tabárez o no Tabárez. Ya estamos jugados. Hay que ir al frente con lo que se tiene que es muy bueno, por otra parte.
Nada de peleas internas, no sirven. Ha quedado demostrado a través de los años. “Darle pa’delante”, dicen los jugadores. Y bueno, esa es la idea. No hay otra.
No es cuestión de cambiar el comisario, después de cuatro años a cargo del establecimiento. Je … suena medio “vigilante” (discúlpeme el vulgarismo), pero con idas y venidas, con entradas y salidas, supo llegar a puerto. Antes, sí, lo recordamos, el técnico que clasificaba, se marchaba, lo cambiaban o lo echaban. Daba lo mismo.
Hoy no. Hay jugadores de primerísimo nivel, son todos protegidos de sus equipos, por algo será. Estrellas en sus clubes y lo han demostrado. Bueno, sólo queda que lo apliquen a la camiseta celeste. ¿Qué no es sencillo? Por supuesto que no. Menos si remamos en contra …
Vivamos esta realidad como corresponde. Esperemos el resultado del sorteo. Estudiemos las posibilidades y arriba Uruguay.
Ya se conocen todos. Han vivido las peores y más angustiantes alternativas. La última durante 7 minutos ante Costa Rica en el Centenario.
Bueno, para que no se repita, el mundial es otra cosa. No queremos “tocar y venir”. Esto es, tres partidos y a a casa. No. Vamos por más.
Apoyemos, saquen de una vez por todas el palo de la rueda, dejen rodar como corresponde y ¿ quien le diga, no?.
Hacerse partidario de la celeste, no es contrario a pensar en contra y decirlo cuando corresponde. Para que se entienda clarito. Si no se está de acuerdo, se dice y no da para pelearse con nadie. Sino para estudiar el tema en consideración y a otra cosa.
Es lo que tenemos que procurar. Alianzas, juntarnos, ayudarnos. ¿ Lo ve tan difícil, compañero?

lunes, 23 de noviembre de 2009

AHORA TE QUIERO VER ...

Escribe JORGE CROSA

Costó mucho clasificarnos. Llegamos, cerrando el marcador, en el quinto puesto, al igual que en Maroñas y frente a un pobrísimo grupo, envalentonado a los gritos y empujones de su gente, más no por su fútbol.
Uruguay y Costa Rica tienen una diferencia formidable. En jugadores, en plan de acción, en todo y sin embargo, sufriendo como parturienta alcanzamos el último lugarcito del ómnibus que lleva al mundial. Como los guardas de antes …” corriéndose, a ver ahí, que hay lugar en el fondo, vamos …” en las mañanas laburantes de hace tanto tiempo.
Y así fue. Nos fueron “corriéndonos hacia el fondo” pero logramos nuestro lugar.

FELICES Y PREOCUPADOS

Esta antinomia se da por consecuencia directa de lo visto. Con jugadores de primerísimo nivel, que salen de aquí y meten goles, a los diez minutos en sus equipos en Europa, nos alarma. Felices por concurrir. Preocupados por la acción colectiva, que no le vimos un funcionamiento redondo, de los parejos, de los fiables.
Lo sabe Tabárez, lo conocen los protagonistas, además no es tan fácil manejar un grupo tan selecto de actores. Obseve nomás enfrente y mire los líos que tiene Maradona, con Grondona, Bilardo y los demás para poder llegar a gustar a alguien en la Argentina.
No es fácil. No nos fue sencillo, para nada, el clasificarnos. Entonces, en el tiempo que resta, sería oportuno juntarnos, charlar, planificar partidos bravos, mover el grupo, como sea, estando con ellos en Europa y formando ese grupo que nunca logró de conjuntarse, por temas de vuelos, de equipos, de autorizaciones de FIFA, por todo eso, que les pasa a todos los equipos de Sudamérica. No somos exclusivos en el tema.

PLANIFICACION Y DESARROLLO

Elementos que serán vitales para mejorar en calidad grupal, solidificar defensa, encontrar hombres de medio juego solventes y potenciar a los enemigos de los arqueros rivales, que, en eso, estamos bien. ¿Observó que no dimos siquiera un nombre?. Es que nos gusta permitir trabajar sin presiones.
Pero debemos aumentar el nivel de juego, sin ninguna duda. No es sufriendo con el empate ante Costa Rica, que nos vamos soriendo del Centenario.
Fueron muchos años de trabajo, para terminar en esas condiciones. Todos lo saben. Y los protagonistas lo reconocen. No fue lo mejor, claro está.
Pero estamos en el mundial. Que el facilismo no nos gane la “cuereada”. Estar y venirse en el primer avión, no es negocio. Estar y pelearla es la finalidad.
Y podemos. Ellos saben que pueden.
El filtro de la eliminatoria, desgastante, incluso hasta por las relaciones, en conjunto, jugadores, prensa, gente, todo, hace que todo parezca más complicado. Y lo es, ciertamente. Al final, hasta las preguntas molestan. Y no están formuladas con esa finalidad, por supuesto. Ya pasó. Durísimo pero ya fue.
Ahora viene el mundial.
Ahora, “te quiero ver”. Ver izar la bandera, nomás, escuchando el himno, es motivo de impactante orgullo.

jueves, 19 de noviembre de 2009

LO MEJOR ES ENEMIGO DE LO BUENO ...

Escribe JORGE CROSA

Estamos en el mundial. Es cierto. Los jugadores festejaron. La gente también. Nosotros, ¿por qué negarlo?. Felices de regresar al concierto de los mejores del mundo y por derecho propio.
Pero, siempre hay un pero, debemos mejorar, Tabárez lo sabe, el cuerpo técnico también, los protagonistas, sin duda, porque no se puede terminar con ahogos ante un pobrísimo rival como Costa Rica, que nos complicó la vida al cierre de la eliminatoria, faltando “nada” para tomarnos el avión.
No puede, ni debe ser. Comprendemos los nervios, la situación del momento, pero la fuerza del grupo hay que demostrarla, con la potencia anímica, esa que parece le faltó a Uruguay, en una pelota entreverada en el área y se vino el gol de Costa Rica. Modestísimo grupo, luchador y poco más. Lo del “Centenariazo” le queda grande al soberbio técnico Simoes, que “se pasó de la raya” varias veces, como si enfrente jugara ante un equipito de cuarta división.
Ni poco, ni demasiado. Un atrevimiento deportivo de alguien que “soñó” equivocadamente, creyendo tener un gran equipo en Costa Rica y deportivamente no lo es.
De mediocre hacia abajo. Y sin embargo, de allí nuestra preocupación, nos causó problemas.
El ingreso de la cabeza del Loco fue el milagro de la noche. Gol. Y al mundial. A pesar del empate que nos anestesió y nos dejó al borde del abismo. Pero lo que no pasó, viejo, no pasó y punto. Que pudo ser y no fue … y de esos “ pudos” vive el deporte del mundo. Capaz que … y si entraba aquella y la otra …. No. Las que entran son las que se cuentan y se terminó. Basta de fantasías. Eliminamos con sacrificio a Costa Rica, un rival “media campana”, pero que nos hizo fuerza.
Entonces, al estar en el mundial hay que mirar hacia adelante y mejorar todo lo que se pueda para llegar brillantes a Sudáfrica.
¿Qué se pudo jugar mejor? Claro que sí. Yo también pude acertar el Cinco de Oro, pero me olvidé de jugar. Son todas especulaciones. Ya pasó el mal momento.
Muchos años detrás de la pelota, discusiones, cambios de guardia, modificaciones de dirigentes, unos sí, otros no, siempre los uruguayos con problemas.
A pesar de ello. Adentro. Sudáfrica con nosotros. Acaso no de la mejor manera, pero ¿ sabe algo ¿ LO MEJOR ES ENEMIGO DE LO BUENO. Y no le busque vuelta.
Que se pudo hacer todo mejor, por supuesto. Pero no solamente dependió de los jugadores y el cuerpo técnico, hubo otros problemas que complicaron nuestra participación.¿En cuantas oportunidades no disfrutamos de lo bueno, porque esperamos algo mejor? No dejemos que nos roben este feliz momento y pensar en que podría haber sido de otra manera, pero no fue.
Es momento de alegría, con reflexión incluída. Las eliminatorias son más complicadas que un mundial. Se sabe y lo comprobé desde el 70 en México hasta hoy.
Estemos felices, pero no confiados. Tabárez y los muchachos saben que faltan ajustar una cantidad de piezas para llegar con el motor “0” km. a Sudáfrica.
Otros grandes equipos del mundo quedaron afuera. Por ejemplo Rusia, con Guss Hiddink y toda su sabiduría. La clasificación de Francia fue lamentable, por ejemplo. Parece, desde los tiempos de Diego, que con la mano también vale. Así se clasificó Francia. Ucrania, con todo su poderío afuera.
Por lo tanto, hemos superado une etapa que algunos grandes de verdad no pudieron y lo verán por TV.
Aprovechemos éste tiempo de paz, estudiemos donde estuvieron nuestros errores, corrijamos, sabemos que lo harán y veremos a un Uruguay distinto y muy bien representado en Sudáfrica. En definitiva, “Doña Soledad, póngase un poco a pensar” … cantaba Alfredo Zitarrrosa, no fuimos mucho menos que los promocionados argentinos, que, por ventaja mímina, en partido olvidable, se clasificaron. Así que ni tan tan, ni muy muy.
Sonrisas por la realidad. Vamos al mundial. Dudas por el final del juego. Solucionables, claro. Es momento de reflexión, pero respirando hondo y con satisfacción.

martes, 17 de noviembre de 2009

FANTASIA AYER, REALIDAD HOY ...

Escribe JORGE CROSA

Todos nos preocupamos por Uruguay. Es lógico. Es la ida a un mundial la que está en juego. Como esto lo escribo antes del partido, no me queda otra que soñar que ya vamos a Sudáfrica y no otra cosa. No quiero pensar en nada más que eso y “ta”, a la uruguaya. Ganar, empatar, no sé, “inventen, uruguayos, inventen”, pero vayamos al Mundial. Respeto al rival, pero somos más, tenemos mayor jerarquía en nuestros jugadores y claro, hay que demostrarla. No es cosa de aparentarlo. Hay que jugarlo. Y lo haremos.
Pero lo que también me ocupa en éste editorial es River Plate. Es Carrasco, son los duendes de éste técnico que les ha hecho una campaña notable a los darseneros y no creo que me defraude, justo ahora que “faltan 100 metros se ve el disco”. (términos turfísticos, claramente entendibles).
Dicen que le falta defensa, dicen que se mueven demasiado y pierden las marcas, dicen que la Liga allá es dueño y señor, dicen …
Dicen tantas cosas … Yo lo que ví acá es que River tuvo que ganar por más diferencia porque el golero “liguero” fue un manual de cómo atajar, de casualidad, por estar bien ubicado y otras porque “se le abrió” el destino …
En fin … dijera Carrasco y acompaño, seré breve. Creo en River, si me equivoco esto queda escrito así que no hay vuelta de dar marcha atrás, por más que jamás lo hice y lo haré y creo porque la audacia, el coraje y la valentía de jóvenes, algún día tienen que tener su premio.
Y ésta es la oportunidad. Se ha hecho todo bien. Pocos pensaban que se podía llegar a este sitio. Pues aquí están los muchachos.
Que jueguen como Carrasco les dice y a otra cosa. Nada más. Y que sea un agradable partido y que le vaya bien a Fosatti, por ser un señor, pero que le vaya mejor a Juan, porque está construyendo en realidad, lo que fue una fantasía.
Y en el fútbol, también vivimos de sueños y quimeras …

domingo, 15 de noviembre de 2009

HAY QUE CAZAR AL OSO ...

ESCRIBE JORGE CROSA

Hay que cazar al oso …
Porque haber ganado en la pista rápida del Saprissa, por ventaja mínima, no asegura nada. Aquí ya no está importando si se jugó bien, mal o regular (notable no fue), sino que se ganó y es lo único que sirve.
El pragmatismo que expongo tiene que ver – con la actitud que deberíamos observar los espectadores del Centenario – el próximo miércoles.
Las frases comunes que se escucharon no me sirven. Que “no se le ganó a nadie … “ es falso. Es un equipo “sorpresa” éste de Costa Rica. Podrá no tener un gran equipo, es cierto, pero, ¿por qué confiarnos en que vamos a ganar cómodos y ya está?
No está nada. Hay que ganar. Y nada más que ganar, aunque sirva el otro resultado. Pero eso no me importa, una clasificación para un mundial, por un gol, es demasiado riesgosa, como para pensar que, como jugaremos de locales ya está el asado pronto.
No es así. Hay que mejorar la producción. Tabárez lo sabe. Los jugadores también. No fue una exhibición la que dimos en San José de Costa Rica. No tenía por qué serla, es cierto. Había que ganar y nada más. Se logró el objetivo, como dicen los entrenadores. Ahora viene el cierre de la campaña. Una dura, difícil, complicada y entreverada actuación de la celeste, que, con sus jugadores de categoría, debería haber llegado con luz al disco. No fue así. Pues no importa. Se está llegando.
No confiarse, es de escolares el pensamiento. Hay que buscar el mejor rendimiento con todo el armamento que se tenga a disposición y estoy seguro, que, como es habitual, dejando el alma y pedacitos de corazón en el campo, juegue quien juegue de titular o suplente, cruzaremos el Rubicón. Hay un mandamiento que cumplir. Es el último. Clasificarnos al mundial. Quienes crean que es sencillo, se equivocan. Los partidos, hay que jugarlos, frase de los jugadores, simple, lógica, pero concreta. No se ganan antes en los papeles. Se vence allí, donde el golero rival no llega y la globa acaricia las piolas ajenas.
Entonces, con toda la fe del mundo. Ponga el equipo que quiera el técnico el tema es vencer. Sudáfrica, finalmente, está esperando la celeste.
No la defraudemos. Hay una fantástica historia que avala esa camiseta. La dignidad de usarla ya es una garantía de orgullo.
Valentía, fuerza, potencia, corazón, todos los elementos que siempre estuvieron con nosotros deben poblar el Centenario.
Uruguay camino al Mundial. Está cerca. Es cierto. Pero se debe concretar el sueño.
No hay nada ganado hasta el cierre del último juego porque el fútbol y el deporte es así. La confianza no es buena consejera.
Si. Para ir al mundial, hay que cazar al oso …
Y después vender la piel.

viernes, 13 de noviembre de 2009

LOS DUENDES DE JUAN ...

Escribe JORGE CROSA

Los duendes de Juan.
Alegría, explosión, dinámica, velocidad, toque, distinción, esfuerzo y una entrega formidable, más que un compromiso real con el fútbol que pretende Juan Ramón Carrasco, fue el resultado de la victoria notable de River Plate frente a Liga Deportiva de Quito, anterior campeón y con un técnico de primera, como lo es, Jorge Fosatti.

SIN EXCUSAS, PURA CLASE

Faltó el Japo. Mala suerte. Arreglate como puedas. Rizzotto, Diego Silva y John Varela (impecable), junto a Puppo, Córdoba y Porta, hicieron idas y venidas, con jugadas inteligentes, porque creen en ellos, porque creen en Carrasco y vino el primer gol. Varela le dijo “tomá flaco” y el hombre de los “portazos” la mandó a soñar con las piolas ecuatorianas. Habría más. Siempre dominando River. Todo pasa rápido. La pelota, el medio campo que, de repente no existe, aparece y desaparece el peligro.
Los ecuatorianos y su desconcierto. Juegan hacia los costados. Reasco, De la Cruz, Calderón, Méndez, Graf, Bieler, no encuentran la pelota, ni el juego.

UN PREMIO, MAS QUE UN GOL

Sin embargo, viene el empate. Méndez , la fortuna y gol. La dejó pasar Graf, inteligente y mano a mano con Dos Santos, entró. 1 a 1. Un premio, más que un gol.
Además, poca “liga” ante Liga. Porta afuera, Varela también. Regalos “de la casa”. Sin embargo …

RIESGOS DE LA APUESTA

Axioma para seguir en la Copa y subiendo. Como en la Bolsa de Valores, ya que Juan insistió (en una prueba “de su galera”, con un “inalterable” dólar, que, por más que le den), se mantiene igual. A River “le dan”, pero si creen los muchachos en lo que dice Juan, pasa esto. Gana. Y ya van … . No es cuento. Es una realidad. Es un fútbol que regala alegría, peligroso, incisivo, veloz y sorpresivo. Es posible, sí, que por momentos, quede “pagando”. Y … son los riesgos de la apuesta. Boxeador y pegador, a la vez, es imperdible.}
Es lo que trata de hacer, con sus duendes, Juan Ramón. Una historia nueva, con la generación nueva, para que los jóvenes crean que se puede. Este es el comienzo. Se puede, ya vieron que se puede. En casa hay que ganar. Allá veremos.

¡AFORTUNADO DOMINGUEZ!

Así fue. El golero de Liga, anduvo compró un par de quilos de suerte y los tiró en el área. Rebotes, pelotas en los caños, atajadas buenas, es cierto, pero con una cuotita de fortuna de novela. No hay que quejarse. Igual le entró la de Córdoba. 2 a 1. No entendía nada el visitante. Pero …¿éste River, cómo es posible que …?
Y … los duendes de Juan. La aplicación de un sistema arriesgado, preciosista, al borde del abismo, a ganar o morir en la lucha, pero siempre al frente. Ese es Carrasco. Así son los muchachos que prestan atención y cumplen. En casa hay que ganar. Tarea cumplida. Allá será otra cosa. Pero esta alegría, el fútbol que regaló River Plate, las jugadas de taquito de Varela, la sorpresa de los grandotes ecuatorianos, el grito desesperado de Fosatti: ¡Corran, che, más rápido!, al ver “que se le iba la novia”, son pruebas bien claras de un fútbol inteligente, arriesgado y valiente.
Una sonrisa dibujó el Centenario. ¡Cómo jugaron!, fue la frase repetida, cierta, real, concreta.
Los duendes de Juan …
Bien botijas, afirmen su concepto, escuchen, la concentración es fundamental. No hay muro que no caiga. Carrasco las sabe “lunga”.
River Plate dio mejor espectáculo que el que supusimos ir a ver. Que se repita en Quito. Será bravo. Nada en la vida es sencillo.
Sabiduría, respeto, creer que se puede, un fútbol corajudo, sin complejos, con ideas, con soluciones. Lo vimos, entonces, lo creemos.
Allá en Quito que regresen, único pedido, los duendes de Juan …

miércoles, 11 de noviembre de 2009

LOS NEGATIVISTAS

ESCRIBE JORGE CROSA

Como materia de estudio clínico, el negativismo, ha sido un tema muy serio desde hace muchísimo tiempo. El hombre que lo ve todo al revés, antes que suceda, no es, justamente, el más inteligente. Aquí, en esto del fútbol, está plagado de negativistas.
Todos con su cuaderno, su librito de consulta y claro, los resultados de los últimos juegos de Uruguay en las famosas eliminatorias, les adjudican cierto hándicap a los “capos” del análisis y la concepción de los hechos.
Me parece que el fútbol es mucho más sencillo. Entró. Gol. Si preparamos bien el grupo, se vence. Si no, pasa lo que viene siendo una serie de angustias continuadas, que ni en nosotros creemos. Allí entran los negativistas.
Siempre es más fácil no creer que creer. Está demostrado. Ellos tienen que ver, de lo contrario, nada. Nuestras actuaciones futbolísticas, salvo notables excepciones, de última hora, como la de River Plate, de Juan Ramón Carrasco, los han confundido. ¿ Cómo es posible que en un fútbol que tiene que pelear con Costa Rica por un lugar para Sudáfrica, River Plate, esté entre los cuatro mejores de Sudamérica?. Un misterio que tendrán que resolver éste tipo de gente que ve todo oscuro, porque, ellos mismos tapan el sol.
Son así y serán así. Saldremos campeones, pero … la camiseta no era la más adecuada. Vencerá River a Liga, pero “no jugó tan bien”. Negativismo. Tema médico, si los hay.
Hoy esperamos por clasificarnos para el mundial. ¿ Cuál es la duda? ¿ El haber llegado a ésta instancia, a una pelea con Costa Rica? Y bueno, así se dieron las cosas. Pero un tema son las eliminatorias y otro muy distinto el mundial.
No “estoy adornando el carro”. Simplemente expreso lo que siento, para no expandir ese clima de descreimiento y de incertidumbre que surge desde muchos sectores de quienes andan con “licencia para opinar …” En fin.
Ya pasó el tiempo del “ser distinto” estando en contra. ¿ No se dieron cuenta? Una pena. Pero ese tren, el del rebelde sin o con causa, ya fue. El que pone cara de malo, no es malo. Es horrible, pobre. “Hacerse el guapo, es grave”.
Si no hay con qué aguantar después …
En síntesis, ¿qué beneficios otorga el hecho de insistir sobre el yunque, si sabemos que es para eso, para golpear?.
Déjelo quieto. Las generaciones de hoy, quieren victorias y respetan el pasado. Pero este tipo de gente, los “negativistas”, que lo son desde que nacieron, está claro, se erigen como “los distintos” de la película.
Jugaremos contra Costa Rica por un lugar para el mundial. Una sonrisa, por favor. Aunque sea para la foto. Gracias. Ahhh … y no se olviden de “hacer” el equipo, de marcar los cambios y enojarse porqué no juega fulano o mengano.
No me cambien, “señores del no comprado”. Eso sí, no festejen si viene jugoso el asado. Déjelo pasar. Sea coherente y respete a la gente. Vaya y propóngase otra tesis negativa, iniciándola que “al final, no le ganamos a nadie …”.

jueves, 5 de noviembre de 2009

LA FABULA DE UN SOÑADOR ...

Escribe JORGE CROSA

River Plate le ganó 1 a 0 San Lorenzo. Escrito así, sin más detalles, sería una noticia más del fútbol argentino.
Pero, hete aquí, que el truco está en que ése River es el uruguayo, el que aparece de menor costo, de escasas participaciones internacionales, no comparables, claro está con la alcurnia de los del Nuevo Gasómetro, sus figuras, sus nombres, las promociones continuadas, “del otro lado del río” y la infalible mediática figura de Diego Simeone, con cracks para los argentinos, como el Killy González, su golero el lomudo Migliore y el entorno que da la la televisión, con profesionales argentinos, esperando, lógicamente, el buen desempeño, del equipo del Cholo y su pase a cuartos en la Sudamericana …
Ante todo ese escenario, pleno de confianza local, apareció el “soñador” Carrasco y su gente. Humilde, tranquila, serena y a buscar un resultado interesante que lo ubicara, por lo menos, en los penales.
“Las luces de Buenos Aires” atropellan a cualquiera, ¿no?. Es un decir, claro. Como que te van acomodando a un mundo diferente, 30 minutos por medio, nomás …
“Al otro lado del Río …”, dijera Drexler.

Y AL OTRO LADO DEL RIO …

River salió con todo, con un fútbol, más veloz, más inciisivo, teniendo como meta el gol tempranito, para tranquilizar los ánimos. No pudo ser en el primer tiempo.
Para destacar hay que hablar del desarrollo futbolístico que descolocó a San Lorenzo. La pelota en el medio juego, con velocidad para la marca y el dispare rápido hacia adelante “a ver qué pasaba”, fueron las constantes de un River entusiasmado en “que podía ser” …¿por qué no?.
Rivero, Reynoso y el Killy, poco pudieron ante las habilidades de Jorge Rodríguez, Richard Porta y Córdoba, teniendo como referente, siempre, a cada llegada “santa”, a un “santo” defensor como Luciano Dos Santos, atajador y convertidor de penales, al cierre, cuando la suerte está echada, pero se hizo lo que se tenía que hacer.
Jugarle bien y ganarle al mismo San Lorenzo en su cancha. Al igual que ellos hicieron acá. Era una tarea harto complicada. Se logró. Vale un disparate. Una mención a la entrega, al coraje, a la velocidad, a no desconcentrase jamás y allí está el resultado.
Bocas abiertas, asombro y palidez en San Lorenzo. Hinchada que no grita. Equipo que no juega bien. Confusión en Simeone. ¿ Qué pasa?
Sucedió que el planteo, frontal, de un grupo querendón, con fibra y temple, superó la gran dificultad del “gran” equipo por delante, para igualar las chances, “once contra once”. Así lo soñó Carrasco. Así fue.

¡PORTAZO!

Al abrir la urna del segundo tiempo, San Lorenzo no sabía que había un voto de Richard Porta, ante un error defensivo de González y en una jugada de gran velocidad y clase, Porta se desplazó hacia la izquierda, en plena área sanlorencista, tocó para él mismo y enganchó un remate cruzado, “allá”, donde Migliore saliera en la foto y nada más, pero con la globa adentro. River 1 a 0 a San Lorenzo.
Y el primer sueño cumplido. Ya estamos iguales, como el tango de García Jiménez. “Mi noche es tu noche, mi llanto tu llanto, mi infierno, tu infierno.”
Luego vino el control de la pelota, aún cuando siempre se buscó un segundo gol, que no llegó y el baile terminó.

SUEÑO DE BARRILLETE …

Dijo Eladia Blázquez, “ Desde chico ya tenía en el mirar, esa loca fantasía de soñar …”
Y Carrasco soño. Y los jugadores también. Y nosotros también. Los penales. La suerte y nada más. No queda otra cosa. El que está designado a seguir, lo hará.
River Plate, antes, con la victoria, como meta, ya había cumplido. Le ganó a San Lorenzo, nada menos, en su cancha y a su presente y a su historia. Esa es la realidad y ninguna otra más.
Ahora, a cruzar los dedos, en fijarnos en quienes los tiraban y en Luciano Dos Santos, de gran labor.

¡SE DIO, POR FIN, SE DIO!

Fue figura el golero de River Plate y el Nuevo Gasómetro empezó a apagar sus luces con rapidez. No había mucho ya para mirar… para ellos, claro.
Al detener el último penal, ese tiro del final, que no le salió a Pablo Pintos, las sonrisas de un país, iluminaron la noche montevideana.
La “teve” nos mostraba la alegría con descripción de los riverplatenses. Héroes fugaces, pero héroes, al fin, que festejaron una fábula, de ésas simples, cuasi infantiles, hasta con humor que Juan Ramón del Yí, les cuenta cuando habla del origen de la pelota, ¿de donde viene?, ¿ qué come? ….

ZEUS Y LOS HOMBRES …

Y no podía dejar de finalizar mi visión de una noche fantástica, con una fábula. Esta vez de Esopo, que habla de Zeus y los hombres …
Dice que Zeus, después de modelar a los hombres, encargó a Hermes que les distribuyera la inteligencia.
Hermes partió la inteligencia en partes iguales para todos y vertió a cada uno la suya.
Sucedió con esto, que los hombres con poca estatura, llenos por su porción, fueron hombre sesudos, mientras que a los hombres de gran talla, debido a que la porción no llegaba a todas las partes de su cuerpo, les correspondió menos inteligencia que a otros.

POR LO QUE …

“No es la apariencia de grandeza lo que confiere grandeza, es lo que está por dentro y no se aparenta, lo que nos hace ser lo que realmente somos”.
Y colorín colorado, River está clasificado.
Una pequeña heroica labor que los tiempos recordarán, sin duda. Pero que, hoy, nos permitimos festejar … “del otro lado del Río”.
Bien River, buena muchachos por la entrega y por el temple ante un grande, como San Lorenzo.
¡Bravo, Juan Ramón del Yí, bravo!

martes, 3 de noviembre de 2009

DE ASIENTOS VACIOS ...

Escribe JORGE CROSA

¡Si no fuere bravo y difícil ser Director Técnico, 3 millones de uruguayos lo seríamos! ( De hecho, “nos sentimos” así, desde tiempo inmemorial). Y así comienza esta historia.
Esa es la realidad, bien clarita. Y pierden. Y se tienen que ir. Y ya está. El fútbol es eso. Zafral. Epocas buenas , malas, regulares, pésimas, olvidables, inolvidables. Es el deporte.
El inicio tiene que ver con los cambios de los orientadores durante el año 2009, los que ganaron, por ejemplo, Pelusso, ganó y dijo adiós. En fin. No es el modelo, justamente. La lucha está siempre en el marcador. Gustavo Matosas, venció y buenas tardes. Casos señalados. El resultado marca la valija afuera o adentro del vestuario. Siempre.
Y uno mira a los de abajo y sus técnicos y les desea suerte, porque son profesionales y gente bien que no se quiere que pierda el laburo, pero, el marcador, la mesa directiva, la hinchada, los dirigentes y el dedazo que marca el final.
En Uruguay y en el mundo es así, miren el archicrack Pellegrini. El chileno a cargo del Real. Perdió ante un grupo de 3ª. O 4ª. , llamado Alcorcón por 4 a 0. Ya los madridistas lo miraban de otra manera al técnico. “!Está bien que sea la Copa, hombre, pero perder así el Real, vamos, eh, vamos!!!!”. Eran las reflexiones, a los gritos de los fanáticos de los galácticos que se están quedando sin “Andrómeda”, me parece.
Regresando al barrio yoruga, los “DT del subuelo”. Los que hoy la pelean, ocasionalmente, bien de abajo. Julio Antúnez, del Atenas de San Carlos, Julio Ribas, que no se explica lo que pasa, como que no le cierra este año fatal, Trasante y su adiós al Parque Palermo, Sanguinetti en Cerro, allí, “llevándola” como se puede, el empuje de Cerro Largo “a los ponchazos” con Danielo Núñez y ni cito a los que se fueron, porque la ronda es larga.
Mire como será el asunto que algunos profesionales se van y quedan “stand by”, que, a veces es eterno. No llama nadie. Y eso marca un atraso en la carrera del orientador. Luego vendrán ofertas del exterior. Equipos raros, incluso de Sudamérica, pero, raros. Ya lo hemos leído en varias oportunidades en el libro de Ariel Longo, Campeones. Síntesis: ganás son un fenómeno. Perdés, adiós. Duro, pero real. Una historia que se escribe “a las patadas”, digamos.
Acaso el plantel, de repente el sistema, o si no los dirigentes, los que les dicen: “vaya y ponga a ….” ¿no?. Muchas veces pasa eso. La rebelión del que sabe que la cosa no funciona, va y lo dice a la dirigencia. De frente. Muchos se han tenido que ir, justamente por eso, por decir la verdad.

HISTORIA DE ASIENTOS VACIOS …

Quizás quien hizo una gran campaña con tal equipo, no la pueda repetir y la sonrisas se irán y vendrán los reproches y el “no sabe nada”, (la hinchada es fatal y no perdona) te descoloca y te desespera. Entonces, te vas o te van, que vendría a ser lo más tristón. Por todos los motivos. Por la carrera, porque quedás desorientado y no sabés “que trole hay que tomar” ….
Y mire que hay muy buenos profesionales “vichándola, nomás, eh”. Y el fútbol es así. El deporte es así. En victoria todos sabemos un disparate. En derrota, se mira hacia otro lado ….
Y uno ha visto pasar desfiles, ¿eh?, pero es bueno que sepan, los que pierden, los que están fuera de acción, los que el ruido no les llega, que, siempre hay alguien que los cita, que los recuerda y qué preguntan en donde andan y que están haciendo. Para investigar, para dar una mano, para contar verdades y no para “ensuciar el plato, embarrar la cancha” y ofender al barrer. Esa no es nuestra tarea. Ni la acción original de un periodista.

PERIODISTAS …

Tampoco son periodistas los que, en el triunfo, hasta gritan con los protagonistas y se “acomodan” para ser los primeros (¿) en la nota, en las fotos … . No, no … Periodistas, dije. Al igual que ustedes. Profesionales. Hoy arriba, mañana, abajo. Es la vida. Es la suerte, ¿por qué no?
Estar en el lugar indicado y en el momento justo.
Una historia de asientos vacíos … que bien le puede caber a cualquier periodista del mundo, como, en este caso, a los directores técnicos , que no han logrado sus objetivos y siguen en la lucha. Con humildad, con paciencia, con respeto.
Al igual que a cualquier informador con opinión del mundo. Humildad, dije, paciencia y respeto. Como lo sentimos, bien arriba, el “alter ego”.
Es bueno que sepan, en esta historia de asientos vacíos … que sabemos quienes pasaron por ellos. Y estamos atentos. Siempre. A cualquier movimiento, acción y detalle del personaje en cuestión.
Y la vida no termina al dejar un cargo, porque los resultados son fieros y mandan, porque la función continúa, señores profesionales, aún, con el asiento vacío.

miércoles, 28 de octubre de 2009

"SE SIENTEN SUPERIORES ..."

Escribe JORGE CROSA

Dijo el Sr. René Simoes, DT de Costa Rica.
¿Será una táctica? ¿ Qué será, no?
Acaso un nuevo sistema psicológico deportivo del Sr. René Simoes,que dijo “habernos estudiado muy bien y se dio cuenta que nos sentimos superiores”.
¿ De donde extrajo esa conclusión? Que yo sepa aquí nadie le dijo que “somos mejores que Costa Rica y que les vamos a ganar y que nos sentimos clasificados”.
Quizás, por el contrario, mostramos preocupación por la integración del grupo, la fórmula que piensa Tabárez, los días que se pasarán en Guatamela, el charter “ a medias” para ir o algo así y más regular para la vuelta.
Me da la impresión que Simoes “inventa” una película, a lo Hitchcock, el “maestro” del terror y suspenso por los años 60, con su notable Psicosis (recordar a Anthony Perkins, formidable y Janet Leigh, fantástica), para presentar un escenario o un cuadro de situación de ficción futbolera sumamente “trillado” y con escasos resultados.
Eso de “hacerse el chiquito y decir que los otros está hablando que son mejores”, es un antiguo incentivo de los equipos de barrio, no para una clasificatoria mundial.
Simoes, anduvo buscando, dicen en Costa Rica, vitaminas en Brasil , también, para los ticos. Mire usted. ¿ Serán las que usan los brasileños?. Si así fuere, hay que prestarle atención porque resultado dan, sin duda. Ahora me parece que por el lado de las vitaminas no es la cosa. Pero, en fin, Simoes sabrá.
Su percepción le permitió notar “que nos sentimos superiores” (mirá vos) y que estamos confiados en que obtendremos la clasificación. “Pero están muy equivocados, agregó, mientras tengamos una esperanza seguiremos luchando hasta el final”.
En principio, la “percepción” de “sentirnos superiores” no es una cuestión de ayer de mañana. Además, por formación y conducta, aún sintiéndonos como el DT de Costa Rica lo interpreta, jamás lo daríamos a conocer, porque no es nuestro estilo. No estaríamos peleando en el repechaje si fuéramos extraordinarios.
Debemos luchar, rendir como nunca y jugar más que en todos los partidos juntos de la eliminatoria para llegar al mundial y eliminar a Costa Rica.
No. Ese invento del técnico, para entusiasmar y avivar el ánimo de los costarricenses no correrá.
Pero, no deja de ser interesante, estar informado de lo que se dice y sobretodo, el responsable técnico, que optó por la variante “motivadora”, para preparar lo que se viene.
Incentivar, motivar, decir cosas que no dijimos ni los periodistas a favor de nuestra selección, son los elementos que está empleando René Simoes.
En principio, gracias por enterarnos que “nos sentimos superiores”. No se nos había ocurrido …(¿). Esa percepción psicótica, luego de “estudiarnos minuciosamente”, es un alarde más filosófico que futbolístico.
En filosofía, se trata de psicognosia, esto es, un conocimiento profundo de las facultades del alma.
Disculpe, Simoes, pero me parece demasiado para el fútbol, en donde con talento, un poquito de clase, algún que otro campeonato ganado, mundial, olímpico, de América o Libertadores, no se necesita “sentirse superiores”, en este caso, a Costa Rica.
Nos tocó y hay que ganarle. Nada más. Eso va por cuenta nuestra. Si advirtió que “nos sentimos superiores”, aquí nadie se lo dijo. Es una deducción, elemental, diría, primaria.
Tenemos historia (si quiere puede acceder a ella cuando guste), pero, hoy, hay que vencer a Costa Rica. La historia no juega.
“Su ficción motivadora”, tampoco.

jueves, 15 de octubre de 2009

SIGA PARTICIPANDO ...

Escribe JORGE CROSA

Si Argentina juega poco y nos ganó, de casualidad, hasta casi sin intención de hacerlo, (ni se le pasó por la cabeza a Bolatti convertir), usted, con legítimo derecho, dirá, “entonces, Uruguay fue mucho menos”.
Y no es así. Le aseguro que no fue así. Que el planteo que vino a hacer “éste” combinado argentino, lejísimo de otros que sabían tratar la pelota y jugar con elegancia, fue temeroso, que no le hicieran un gol, que no llegaran por ningún lado los celestes y entramos en el jueguito. Ayudados, sutilmente, muy sutilmente por un señor de rojo, Amarilla él, de apellido, casualmente el juez paraguayo, que cortó todo lo que pudo el trámite. No dejó armar a Uruguay que tuvo enormes dificultades propias, pero que, “ayudadas” por el director del lance, como Amarilla, casi sin percibirse, fue aplacando los ímpetus locales.
Como en la feria, ¿vio?, cuando uno compra fiambre: ‘”¿picado fino o grueso, señor?. Aquí, Amarilla, “´picó” fino. Como para que no se dieran cuenta los que saben poquito de fútbol y para los que algo “junan”, una joyita el paraguayo, pese a lo malo del juego. Un corte aquí, otro más allá y fue llevando el partido sin que la pelota llegara a los goleros con peligro. Nada de complicarse la vida. Eso hay que verlo y el que no lo vio, quedó contento con el resultado. Hablamos de algunos dirigentes, de algunos jugadores, incluso de Maradona, “que no lo vio ganar por ningún lado”, porque vino para no hacerlo (lo sabe muy bien) y algún argentino desprevenido que habrá pensado que “así estaba todo bien”. Argentina al mundial y Uruguay a la repesca. Sin heridos, digamos, de entidad. Un choque, diría el parte policial, “en el que no hubo que lamentar desgracias”.

MAL FUTBOL, “HABIL” JUEZ …

La entrega de Gargano y Diego Pérez, en el medio juego de nada sirvió, porque siempre encontraron a un veterano Verón, interrumpiendo o bien al juez, cortando la jugada. Hábil el paraguayo, por ahí cree que nadie se dio cuenta, sin embargo, ¡pica Amarilla, te vimos!. “Cortaste todo lo que pudiste, en el medio, atrás, a los costados, donde se pudiera y cosa rara, siempre a favor de Argentina. Bueno, raro, no, sospechoso, a ver, sí, pero con gran clase. Esos que no los podés penar, los que entran y salen porque no se les comprueba nada, bueno, ése fue Amarilla. Más allá que unos “gramos” más de fútbol ordinario expuso Argentina.
Si bien nosotros no tenemos jugadores de millones de euros, ¿Dónde estuvo este muchacho Messi? ,¿ el “superdotado Messi”?, esperando que Mascherano o Verón “le hicieran una pierna” y lo dejaron solo frente a Muslera?. Eso no pasó. Como tampoco pasó que Forlán quedara de frente ni una sola vez, bueno, cuando lo hizo fue demasiado obligado y sin chance de gol en su remate. Pero no sucedió nada de lo que tenía que pasar. Responsabilidades mutuas no asumidas. El empate venía bien para los dos.

ARGENTINA DE “PUENTES ABIERTOS” …

Argentina derecho por el canal oficial. Hasta con puentes indignamente abiertos. Uruguay a pelearla contra quien quedara. Fue Costa Rica.
¿Higuaín, Di María, Demichellis, Gutiérrez, Heinze, Schiavi? … figuras decorativas. Igual, como los esquemas fueron mal expuestos, no podía pasar mucho. Más bien, nada. Suárez, Cavani y Christian Rodríguez, se movieron lo que pudieron.
Pero no es cuestión de acusar en esto porque no estamos en la corte. Es fútbol y no se jugó bien. Una: Amarilla, finísimo, no lo permitió. Uruguay intentó, erróneamente el camino y Argentina “encontró” un gol que Bolatti lo gritó hasta sorprendido. Ni sabía que había entrado. Bueno, en realidad, él tampoco sabía para qué había entrado.
De los peores clásicos rioplatenses que hemos visto. Sin duda. Sin fibra, sin jerarquía, sin clase, sin nada para levantar del asiento a la gente que, religiosamente, cumplió con lo suyo. Llenó el Centenario. Pagaron por “La Traviata” de Verdi. Vieron “Misión Imposible”. No da ni para discutir. Ese gol final no cambió nada. Solo que en la estadística, los visitantes ganaron. Nada más. No busque otra cosa.
Pobre Cáceres, se “fusiló” sólo, sin compañía y todavía lo echó el impertérrito Amarilla. Hábil el paraguayo. Lo esperó (ya le había mostrado un cartoncito) y ta. Una pena. Pero “muy bien empujado” por el que dirigió la comparsa de la noche.

ERROR Y GOL: UN “OBSEQUIO”

Con sinceridad no recuerdo ninguna jugada de riesgo real para el arco de Romero. Todo dicho. En un clásico algo tiene que pasar. Bueno, no pasó. Entonces, no salió lo que se pensó en Uruguay y Muslera le pegó tres piñas a la globa y nada pudo hacer en el gol. Quedó “regalado”.
¿Sabe qué? Ni para enojarse dio. A los argentinos que les vaya bien. Que sigan con sus “cuentas pendientes” entre cuerpo técnico, dirigentes y jugadores, que a nosotros, ni fu, ni fa. Y a nosotros que nos vaya de lo mejor frente a Costa Rica y que, la última carta, prevista última carta, se juegue de otra manera. Nada más que eso. De otra manera. Depende de Uruguay, no como en este pobrísimo encuentro en el que intervino, con gran fineza, (cortecitos, amarillas, represiones, rojas …) repito, el juez Amarilla. Y una “perlita” al cierre. Roja a Christian Rodríguez. Total … si la gente ni se dio cuenta.
Además, justo es decirlo, Uruguay le erró al sistema y como Argentina vino a no perder, le vino bárbaro.
De fútbol, ni hablemos. Aburrido como choque de tortugas …

domingo, 11 de octubre de 2009

PA' LOS BOTIJAS ...

Escribe JORGE CROSA
(así ganaban antes los uruguayos)

Para esos botijas que jamás vieron un triunfo de la celeste de esta manera, "a la uruguaya”, como antes, fue este regalo de Uruguay 2 Ecuador 1. Para esos botijas que "no entendían" lo que estaban viendo, ese abrazo fraterno, el grito del viejo desencajado,las bocinas sonando, la silueta de la gente por las ventanas agitando banderas ...¿ Y ésto? ...(habrán pensado los jóvenes)
Las llamadas incesantes de los celulares (hoy, antes no), el palabrerío emocional de los adultos, las frases acostumbradas: "¡Te dije, viste, te dije! ¡URUGUAY NOMA!
Así ganaba Uruguay hace 30 años y pico, botijas, cuando Peñarol era Peñarol y Nacional, Nacional. Dos cuadrazos de novela, con jugadores notables. De allí las Copas Libertadores de Peñarol, el respeto que se le tiene en el mundo al igual que Nacional. Ganadores de la Copa Intercontinental. Jugando … a la uruguaya.
¿Cómo es esto de jugar a la uruguaya?. Lo que vieron, botijas, sin grandes lucimientos, con fuerza, con ardor, con un medio campo que traba siempre, con gente que no deja desplazar a los laterales rivales, que pelea la pelota en el medio juego (Gargano, Pérez, el rato de Eguren) son las armas fuertes del grupo.
Además, agregale un golero que, cuando le llega la globa se pega un estirón de circo y le saca. Ta. Eso era Uruguay, antes … Por eso fuimos campeones, con ese temperamento.
Y no es por ganarle solamente a Ecuador que lo escribimos, simplemente es porque, los hombres son los que ganan por encima de los esquemas tácticos, aunque se respeten los mismos.

¡EN LA HORA Y DE PENAL!!!

¿Qué les pareció muchachos, atrás Scotti, Lugano y Cáceres? ¡Se jugaron todo!, como dicen ustedes, ¿no? Y arriba, Suárez, Forlán y ese ratito milagroso de Cavani, el penal y … como antes decíamos: ¡Loco, quiero ganar, en la hora y de penal! ¿Ta? Forlán respiró profundo y el oro del botín se clavó en el corazón del pueblo ecuatoriano.
Y así ganaba Uruguay y así ganó Uruguay. ¿Si es la mejor fórmula?. No lo sé. Pero sí sé que sirvió para que ustedes, botijas, vieran “cómo era un equipo uruguayo ganador”, por fin, ganador y con ilusiones, aunque queden 90 minutos, nomás y nos juguemos la vida deportiva contra los argentinos.
Eso importa, naturalmente. Todo importa. Pero, ustedes, jóvenes que acaso no nos creían porque veían a un Uruguay sin fibra, desmotivado, con ganas, pero sin suerte, bueno, ahora a los jugadores se les dio. Y eso es lo que vale. Que ellos también les mostraron que “así se ganaba antes …”
Uruguay nunca fue vistoso, ¿sabés?, ni maravilloso, ni notable. Tampoco crean en la frase :”un desastre cuando perdemos” y unos “cracks” cuando ganamos. Ni una cosa, ni la otra.

¿SE DIERON CUENTA, JOVENES?

Botijas, jóvenes, hay que tenerlo bien en claro, “así ganábamos antes …”. Siempre fue así. En los tiempos de tu abuelo, de tu papá …¿ta?
Con muy buenos jugadores de un temperamento excepcional. Lo de Ecuador ha sido un fantástico y oportuno recuerdo, en un momento justo y en el lugar indicado.
Ahora, nos queda contra Argentina.

“ATACA ARGENTINA … GOL DE URUGUAY”

Antes, botijas, por allá por 1924 …Argentina tenía flor de equipo, como siempre y Uruguay “ahí”, arrimando con su gente …
Y se recuerda, para ustedes, jóvenes una frase a modo de sentencia que luego mandaba la cancha, recuérdenla ….
“Ataca Argentina …¡Gol de Uruguay!
Esto quería escribirles, botijas, para que supieran los magníficos momentos que vivimos y porqué decimos que se puede esto, aquello y lo otro.
Pero tiene que prenderse el fuego sagrado y arder al máximo. Ellos juegan bien y muy bien. Tienen jugadores de primerísimo nivel. Todo bárbaro.
Botijas, (yo no lo ví, pero mi abuelo me lo contó y el viejo también …)
“Ataca Argentina …¡GOL DE URUGUAY!
Ahora, tranquilos, en la humildad de la victoria, la concentración, el respeto por el rival y todo eso que se dice, los nervios, la ansiedad, las esperanzas, las ilusiones, todo eso … “el velar las armas” celestes … sí, todo eso, habrá que esperar hasta el miércoles.
Mientras tanto, jóvenes, por fin, vieron “cómo ganaba Uruguay”.
...........................
Capaz que el miércoles, con respeto, claro, ¿se podrán juntar estas dos frases ciertas? : “Así ganábamos antes …ataca Argentina, gol de Uruguay”

martes, 6 de octubre de 2009

NO REPARTAN BASURA

Escribe JORGE CROSA

Ahora hablan de soborno. De corrupción. Justo en las finales de las eliminatorias sudamericanas. Esto dicho así, al barrer, implica acusaciones a quien le toque. A los jugadores, a los dirigentes, a los técnicos, al mundo del fútbol, para hacerlo más redondito.
Y es una alternativa. Una propuesta indecente de las que tantas hemos conocido y nuestros lectores también habrán escuchado.
No es ninguna novedad. Como tampoco una verdad, porque no se puede comprobar. Eso sí, se ensucia a todo el mundo de la pelota, igual que en la vida, en la política, ni hablemos. Es así. Es que cuando llegan los momentos trascendentes, a falta de pruebas, se da por hecho un arreglo y se enchastra bien la cancha.
Entran todos en el juego. El fútbol ya no es una novedad que existen proposiciones de todo tipo. ¿ Y en la política, no?
Es la vida, mi amigo. Cuando les conviene dicen lo que quieren y mucha gente les cree y otros no. Así son las cosas. Hay quienes ven siempre el lado malo del asunto y otros no. Decir que no existen hechos fraudulentos es desconocer que han sucedido y los autores han relatado las acciones delictivas.
Porque, de lo que se habla, es de delincuencia y no de otra cosa. Pero no tomen al fútbol, hoy, como testigo de cargo. Porque se juegan puestos de importancia a nivel continental, como ir o no a un mundial. Que fulano pone 200.000 dólares, que sultano 150.000, para que “vayan al bombo”. (popular frase del turf cuando no se demuestra intención de victoria).
Santos no hay. Lo sabemos. Pero, así, “como quien no quiere la cosa” acusar a todos, por si acaso, por la primicia, por si existió una conversación sobre el tema, para alertar a la gente, por ejemplo, “nosotros lo dijimos primero” y esas imbecilidades, nos parece una eso, justamente, una imbecilidad.
El que viva “con los pajaritos de colores y el cuento de la Cenicienta” tampoco está en la lista.
El que sospeche de todo y de todos, tampoco. Hacerse el detective, como unos cuantos, no existe.
La trampa, mi amigo, tanto usted, como yo, sabemos que existe. Ahora, vaya, acuse, compruebe y reciba el diploma de Doctor Honoris Causa, por su virtud, mérito y estudio probatorio de lo que se trató, en este caso, el soborno.
Eso sí, no es “al barrer” que se acusa a muchísima gente, porque se le falta el respeto y no todos son corruptos, mi amigo. Felizmente, hay gente honrada en todo ambiente y lo demuestra.
Entonces, en éste otro caso de supuesto soborno para el arreglo de un partido de fútbol, dése por enterado y cambie de canal.
De lo contrario verá una serial vieja o una con libreto conocido o un invento para atrapar ingenuos escuchas, televidentes o lectores.
No repartan basura.
El camión ya pasó.

domingo, 4 de octubre de 2009

DON JULIO ...¿ASI QUE ...?

Escribe JORGE CROSA

Mire que noticia, ¿no?, Grondona le dijo a Blatter, así lo informa el portal Infobae, que los jugadores argentinos “no ponen todo”.
Una interesante revelación del dueño de la pelota albiceleste, desde hace más de 30 años, quien se siente disgustado con el rendimiento de sus jugadores.
Inquietante declaración de Grondona que tiene dos destinos bien diferentes: o se la ve venir y ya abre su paragüas celeste y blanco o bien ( si es que se clasifican) dirá , acaso, que lo dijo, en tren de transmitirle fe al combinado, digamos, como una frase energizante, llena de talento, plena de picardía.
Porque, por algo el hombre hace tres décadas que está al frente del fútbol argentino. Habilidad tiene, no hay duda.
Ahora , ¿ será tan así? ¿No pondrán todo? ¿ Y ahora lo dice?, cuando se ve el abismo, cuando como nunca la selección jugó tan mal y perdió con tantos cracks …
Suena raro. Algo así como “ yo no tengo nada que ver”. “Pilatos viejo a la orden”, que no ni no …
Grondona y su limpieza de procederes. Son ellos. Yo no.
No me gustó. No me gusta la gente que cuando ve que se tuerce la vara, acusa que es de mala calidad.
Raro en un tipo “sabio”, conocedor, componedor, gran arreglador de situaciones complicadas. Anda como dubitativo el hombre. Por ahí, son tantos años, que presiente algo que muchos no se han dado cuenta. Que Argentina va a quedar afuera del Mundial.
¿No habrá querido decir eso y le tira el camión a los jugadores, técnicos y demás?
“No ponen todo”. ¿ Y qué más quiere que pongan?
Don Julio, más vale decirlo clarito, de frente. No le tiene fe a Argentina. Esa es la justa. Y prepara el ambiente, por si las moscas. “Yo lo dije”, recuerden …
La veo por esa lado. Viene bien, por tanto, armando el rompecabezas, si nos va lindo por Quito.
El dueño del circo argentino, no le tiene fe a los trapecistas. Algo es algo. Sirve para este lado del Plata.
Después nos veremos las caritas en el Centenario.
Según Grondona: “No ponen todo …”
Bueno. Vamos a poner todo nosotros y sellemos los boletos para Sudáfrica.
Porque que Uruguay va a poner todo y un mucho más, no le quepa duda a ningún elemento viviente.
No le digo que esté como entregado el “Uno”, pero, ese mano a mano con Blatter, diciéndole, “no ponen todo …” da como para alimentar una linda esperancita.
“Argentina al repechaje" … Qué título, ¿no?. Es posible. Todo es posible, ¿no, Don Julio?

lunes, 28 de septiembre de 2009

FELICITACIONES, PEÑAROL

Escribe JORGE CROSA

Una magnífica obra que hay que destacar como corresponde.
Peñarol y su complejo de Alto Rendimiento, que, en el festejo de su 118 aniversario, inauguró con cinco canchas que serán todas iluminadas, gimnasios de césped artificial para todo tipo de preparaciones físicas, vestuarios acordes a nuestro tiempo y a lo que se ve en el mundo del fútbol y algo que realmente vale, llama la atención y hay que redoblar la felicitación a la Directiva de Peñarol: la construcción de un liceo, con más de 40 aulas, capacidad para 150 alumnos, zonas de computación de última generación y solamente resta la autorización del Codicen con su proyecto Gol al Futuro.
Peñarol hizo una apuesta fuerte, grande y soberana en beneficio de la sociedad uruguaya toda. En su faz deportiva y educativa. Un ejemplo espectacular, que, para nuestro país, es altamente significativo.
De este tipo de obras hay que hablar hasta el cansancio porque son y serán el futuro de un área, de un sector de la población del Uruguay.
Contemplando todos sus aspectos. Los deportivos, por naturaleza propia, los de estudios liceales para la formación de los estudiantes y todo un sistema de preparaciones físicas de todo tipo con cinco canchas para un desarrollo, que, se piensa, excepcional, único en nuestro país.
Esto es altamente valioso. El Centro de Alto Rendimiento de Peñarol es una prueba más que se puede, cuando se piensa, cuando hay gente con capacidad de orientación, inteligente y de alto concepto del deporte y del estudio.
Esto de Peñarol es un gran ejemplo. Es una primera gran expresión de insertarse en el primer mundo del deporte y del estudio. Mañana de la informática y así, sucesivamente.
La congratulación de éste periodista, orgulloso por una obra de tal magnitud, seguramente será el de todos aquellos que quieran bien al deporte, al fútbol, a los proyectos concretados y a los sueños realizados.
Peñarol, acaso, sea algo más que El equipo del Siglo XX.
Ha demostrado cómo se pueden hacer las cosas cuando se piensan, cuando hay talento y capacidad.
Peñarol le ha dado al Uruguay, silenciosamente, una enorme alegría.
Enhorabuena.

DE TRAIDORES Y PERIODISTAS

Escribe JORGE CROSA

No crea que voy a escribir sobre fútbol. Acaso sobre la vida, sí. Sobre la triste vida del miserable que odia, que envidia, que usa la palabra alcahuete, de aceptación tácita, tal parece, entre los ordinarios, como término común, de uso frecuente. Triste lo de esa gente. Viven hablando de lo que hacen los demás (mucho mejor que lo que hacen ellos, naturalmente) y sienten rencor y animosidad. Son bichos feos. Como los del zoológico. En esta selva de pseudo inteligentes, ora ignorantes, ora, confusamente, talentosos, parece ser que la batalla del periodismo, de todos sus temas, en lugar de ser el logro, el progreso, el avance, la capacidad y el criterio formativo de las próximas sociedades, se basa, pura y exclusivamente, en acusaciones sobre una persona en particular, acaso, dos, quizás, tres. Parecería que ellos fueran los bienaventurados salvadores de la honestidad, del buen vivir, de la corrección, de la educación. Que, ellos, los talentosos periodistas – por llamarlos de alguna manera – se convirtieron en rectores de la conducta, de la probidad, de la honestidad, del respeto, de la ley. Ellos y solamente ellos, pueden hablar y despotricar sobre todos los demás. Ellos jamás hicieron, ni harán nada que tenga que ver con la falsedad, la mentira, la trampa. No. Los impolutos, no. Uno que aprendió y no en Internet, con Rodó, con Jacinto Benavente, con Horacio Quiroga (en ellos había que estudiar, claro), Carlos Vaz Ferreira, Juan Zorrilla de San Martín, hoy y ayer nomás, con Mario Benedetti, Juan de Ibarbourou, Paco Espínola, Felisberto Hernández y sigue una lista fantástica, se encuentra con éste panorama de ignorantes y da vergüenza.
Por épocas bien cercanas, don Adolfo Oldoine “Old”, el querídismo Juceca, (Don Verídico), con quien trabajamos, Salvador Becquer Puig, Hugo Milton Infantino, gente de raza, periodistas en serio. Genaro Carleo en el basquetbol, Carmelo Gaetán en el ciclismo, Don César L. Gallardo en el fútbol, Don Carlos Solé (ponerse de pie) , por citar algunos nomás con quienes, de niños, de gurises nomás tuvimos el placer de trabajar y aprender con ellos, ve éste panorama ordinario y no deja de asombrarse. En donde el término alcahuete es el más utilizado por aquellos que creen que estar detrás de un micrófono son periodistas o sentarse frente a una cámara o delante, hoy, de una computadora.
Qué equivocados que están. Quien lee esto y recuerde lo que digo, estoy seguro que concuerda conmigo. Hoy no se enseña, se ataca, se fustiga, se ofende, se agrede. No hay intención de crear una escuela o bien construirla de periodismo. Ya sea deportivo o a cualquier nivel. Se han perdido, con ésa gente, los eruditos en la materia.
Uno, que tuvo la suerte y felicidad de alternar con muchos de éstos hombres, le agradece al destino tal suerte. Una fortuna impagable en materia de lecturas, de aprendizaje, de amor por la profesión y el ejercicio de la misma. Eso es periodismo. Eso fue periodismo.
Hoy nos encontramos con éste escenario de cartón, de habladores de lo que venga, total, saben de todo y nos da por pensar: “ Y bueno, maestros, déjelos no saben lo que dicen …”
Son los reyes de la verdad. Escriben, hablan , no escuchan. Les abren la puerta, incluso los “enemigos” e igual hieren, con cara de “cultos” .Eso es traición. Raro caso de falsedad. Se saludan, incluso ríen abrazados para las fotos de sociedad. Ese es el periodismo de hoy.
Déjense de estupideces. Basta de hipocresía. A la gente no le importa la vida de cada uno de esos que andan en la vuelta, sacándose “cartel de campeón” y sabedor de todo. Ya está. El chiste inmoderado ya fue. La grosería también.
Dedíquense a enseñar un futuro mejor para los uruguayos que quieran ser, de verdad, informadores, comunicadores, periodistas, escritores o poetas y no imbéciles de turno, que no hacen sonreír a nadie y que destruyen una de las profesiones de mayor respeto del mundo que es la del periodismo.
Todos se conocen. Todos saben de quienes hablo. Por lo tanto, hacerse los distraídos es tan estúpido como lo que representan cada vez que actúan.
El traidor no otra cosa que un déspota en apuros, que no puede hacer su voluntad, sino resignándose a un papel secundario.
No cuestiono en forma alguna a los espacios dedicados a la sátira, de ninguna manera. Manifiesto, sí, al personalismo, al sentirse el descubridor de malas jugadas, de deudas, de porcentajes fraudulentos. Cuestiono al ignorante, al que cree saberlo todo y lo dice como si supiera.
A ése tipo de periodismo me enfrentaré siempre, porque no enseña, porque no es valiente, porque acusa, pero “hasta ahí”, después, bueno, claro hay ciertas dudas que se tratarán más adelante. Eso dicen ...
Eso no es periodismo investigativo. Ni nada. Es una canallada de quienes les han otorgado acaso un micrófono, un espacio, o algo, para decir lo que le venga en gana.
El periodista es un hombre.
Caramba. Debería haber empezado por ahí.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

POR FIN, SONREÍ ...

Escribe JORGE CROSA

No es para tomarlo “así nomás” el triunfo apabullante de River Plate frente a Vitoria por 4 a 1. Y lo digo porque, quizás, mucha gente no sepa que éste equipo brasileño, venía de una campaña notable en el Brasilerao, grupo A. Le ganó al puntero Palmeiras por 3 a 2, venció al segundo de la tabla, Internacional de Porto Alegre por 2 a 0 y empató con Gremio 1 a 1.
Por lo tanto, no fue una victoria más. El brasileño, junto al argentino, son los mejores, según los resultados generales, los mejores del continente. Pues, entonces, hay que destacar como corresponde el triunfo excepcional del equipo de Juan Ramón Carrasco.
Porque, cuando ganan Peñarol o Nacional, los títulos son grandes y los análisis profundos. No sucede lo mismo con River Plate, por ejemplo o Defensor o Danubio o Liverpool. Y eso esta pésimo, en la faz comunicadora.
Lo de River Plate fue notable. Lo repito porque fue así. Más allá de los goles de Córdoba, muy buenos los dos, de Andresinho y Jorge Rodríguez, está el esquema de juego puesto en el campo. Sin miedos. Sin temores. Acaso perdiendo el hilo en el medio campo, a consecuencia de un trabajo ofensivo alegre y vencedor, cosa a corregir, seguramente en la revancha, éste River nos dio un alegrón, a los que nos gusta el fútbol, sin especulaciones, sin miedos, sin tristezas, sin torpezas.
Carrasco los hace jugar de otra manera. Vitoria no se dio cuenta y en un ratito ya iba perdiendo 2 a 0. Eso es grave para un grupo que le ganó al puntero de su campeonato, que tienen – según lo que sabemos – uno de los mejores juegos del mundo, la tabla de la eliminatoria lo marca claramente, por lo que, no es fácil hacer lo que River Plate, con sus pibes, sin nombre algunos, deportivamente hablando, se mandaron en el Centenario.
Entonces dieron ganas de gritar los goles. Aún siendo periodista, sí, se gritaron los goles. Porque valieron la pena. Porque la sonrisa de River es la que perdió hace mucho tiempo el fútbol uruguayo y que debe y puede, ya se vio, reconquistar. Ni regalarse, ni nada. Jugando a un fútbol práctico, técnico, ofensivo, llegador y no dando pelota por perdida. Eso sí, para corregir hay mucho. Juan Ramón lo sabe. Ellos también.
Pero la satisfacción por una victoria terminante, de esas que no tienen vuelta, que nos alegran y nos reconfortan, hay que significarlas. Hay que decirlas ya. Es el momento.
No sé cómo le irá a River Plate en la Sudamericana. Importa lo que ví. Me pareció, sencillamente, brillante.
Desde abajo, Dos Santos, Bica, Conceicao, Sosa, Klingender, Porras,Jorge Rodríguez( gran desempeño) , Zambrana, Puppo, Souza, Córdoba ( excepcional), más Rizzotto, Andresinho y Porta, formaron un grupo oriental de avanzada como hacía tiempo que no veía. Acepto, acaso, que el medio campo quedó medio vacío, pero es cuestión de adaptación y tiempo.
El asunto fue un resultado de 4 a 1, frente a un equipo brasileño que se mide a la par con Palmeiras, Internacional, Gremio y los grandes de ese país.
Hay que destacarlo como corresponde. No solamente cuando ganan, empatan o pierden, Nacional y Peñarol, sino cuando se destaca un grupo trabajador que juega “a otra cosa”.
A esa “otra cosa” que nos gusta a los futboleros, a los deportistas, a los periodistas. Al fútbol. Nada menos. A un fútbol que se ve como un eclipse. De tanto en tanto.
Bien Juan. Buena, muchachos. Suerte en Brasil. Se la merecen. Hacía tiempo que quería escribir algo así, mucho tiempo y no podía. Gracias, River Plate.
Por fin salí con una sonrisa del Centenario …

lunes, 21 de septiembre de 2009

SILENCIO Y APLAUSO

Escribe JORGE CROSA

Pierde el equipo. Se va el técnico. Es la regla. Observo la excepción: Pelusso. Ganador y se fue igual.
Siempre o casi siempre ha sido así. Los dirigentes quieren ganar, pagan (algunos) otros amagan, otros, directamente no lo hacen y quienes sí cumplen quieren ver los resultados. No voy a citar ni los equipos, no los técnicos, porque no importa. El hecho siempre ha sido el mismo. En Buenos Aires, por ejemplo, dura un poquito más lo novela. El caso Basile en Boca. El tema Gorosito en River. Tienen otros argumentos. Es otra formación deportiva. Allí anda en la vuelta, a cada rato, el nombre del Enzo para River. Diga que no tiene el curso y que él no le tiene muchas ganas al asunto, de lo contrario, ya sería el DT de los millonarios. Incluso, si llega a ganar D’Onofrio, quien sabe si no toma un puesto de Manager o Director General. Se verá.
Pero lo que quiero significar es que en Argentina se maneja de otra manera el tema porque son más profesionales, son más, hay más dinero, se trabaja de otra manera. Es incomparable un medio con el otro. Aquí perdés tres y afuera o en la puerta. Allá, no. Cinco, seis y reunión de comisión deportiva, primero y luego la directiva. Nosotros, que trabajamos allá, sabemos cómo se manejan los argentinos. Claro, hay más dinero, es otro mercado, se trabaja de otra manera. Con mayor disponibilidad, naturalmente.
Y por estos pagos, siempre “anda la calesita”. Hoy acá, mañana allá, pasado, ¿Quién sabe?. Es la vida de los técnicos. Si aciertan, son Gardel. Si no, violín en bolsa.
Es la ley. Y no hay que sorprenderse siempre fue igual. Si ganás, te quedás. Si perdés, te vas. Muchas veces se cometen injusticias. Pasa en la vida, ¿cómo no va a pasar en el fútbol?
Pero hay una característica que muchísimo tiene que ver con el “ir y venir” de los orientadores: su personalidad.
Podrán tener sus problemas, sus dificultades, sus conflictos, pero cuando uno recuerda, por ejemplo a Don Hugo Bagnulo, al mismo Juan Eduardo Hohberg, el último que nos ubicó cuartos en Mundial, en un Profesor notable, como José Ricardo De León, uno observa ejemplos de conducta, de vida, de enseñanzas.
Acaso eso sea lo que se va perdiendo. Se va alejando la clase. La categoría. La prestancia. La postura, esa condición de líder de grupo que nace con el hombre y la representa en cada escenario en donde muestra a sus dirigidos. Porque, al final, el fútbol es como el teatro, una obra que representamos todos los fines de semana y los actores deben estar cien por ciento, siempre. Y el director, ni que hablar. Un verdadero señor de la escena … deportiva.
Esperemos, junto a ésta reflexión, el próximo 10 de octubre y luego la Argentina aquí en casa.
Queremos ver dos sensaciones bien diferentes: el silencio de Quito y el aplauso del Centenario.
Queremos ser todos responsables, para darles ese empujón de victoria a Tabárez y sus muchachos. Entre el silencio y el aplauso, allí estará la celeste.
No lo considere imposible. La obra está escrita. El director la sabe. Los actores la conocen. Hay que estrenarla. Sólo eso. Estrenarla.

jueves, 17 de septiembre de 2009

LA POBRE GENTE

Escribe JORGE CROSA

Acaso lo que le sucede a muchos, aquí en Uruguay, ¿ y por qué no en el mundo?, sea “festejar” por decirlo de alguna manera la intriga, la desazón, la mala suerte de los demás. Ejemplo: Si a Uruguay le va mal en las eliminatorias, tienen de qué hablar. Y mal. Tema para rato. De oficina, de boliche, donde sea. Lo mismo ocurre con Peñarol y este asunto inconcluso del técnico, solucionado parcialmente por Víctor Púa. También es de uso cotidiano de “los heridos por algo”, castigar, fustigar, maltratar e incluso hasta inventar, si llega el caso. De política, ¿Qué le voy a contar? ¿Si le va bien?, ni le cuento.Si le va mal, ellos “ya lo sabían” porque “andaba en malos pasos …”
Siempre saben todo o para destacarse, inventan, ¿total?, esa es la cuestión. Hablar por hablar. ¿ Sustento, verdades? Ninguna. Olvide, amigo.
¿No le ha pasado alguna vez lo que narro? Esto es, que los “correveidile” exageran, mienten, tergiversan, entreveran las cosas, complican aún más lo que ya está complicado y sin ningún tipo de finalidad sino la de herir a sus pares. Por gusto o por algún problema mental, eso, sin duda.
Hay una mayoría de ese tipo de ¿gente?, que les gusta el morbo, la mentira, la falsedad, el engaño, son completitos.
Y esto lo cuento porque cada día que se acerca el 10 de Octubre, fecha que tendremos que jugarnos la vida (futbolísticamente escribiendo) contra Ecuador, hay de todo tipo de comentarios. Y pocos, muy pocos, alentadores. Todos en contra. O casi.
Será por la mala campaña de la celeste, se reconoce y lo afirmo. No se anduvo nada bien. Pero nada bien. Eso sí, si agregamos “cuentos y mentiras” sobre esto, aquello y lo otro, bueno, el escenario no será el mejor para los uruguayos.
Y es una lástima que haya gente que (¿disfrute?) viendo sufrir al prójimo. A un uruguayo como él. Bueno, ésa gente, de uruguayo no tiene nada. Se ve en todos lados, los que dicen cualquier disparate, los que creen siempre tener la razón, los que jamás se equivocan, los que son los impolutos en esta comedia, los que “venden” una imagen falsa. “Esa” gente, que dispara dardos venenosos con diversos fines, económicos, unos, esto es, vender más de algo, de repente, o juntar más oídos o bien que los reconozcan por la calle, en fin, hay de todo en esta “Villa del Señor”.
Y es muy triste, que ésos que se dicen “justicieros y dueños de la verdad”, no sean del todo fiables en cuanto a su honestidad.
Hay que tener cuidado puesto que esa posición altruista, de jurista diplomado al más alto nivel, se puede venir abajo en pocos segundos. Todos cometimos, cometemos y cometeremos errores, sin lugar a ninguna duda. No existe la infabilidad. Es absurda y tramposa.
El respeto hacia los demás es una buena disciplina. Si no lo quieren ejercer, allá ellos. Si gozan con las “malas” de Uruguay en todos sus aspectos hablamos, pues que lo sigan haciendo. La gente, se sabe, no es tonta. Separa, clasifica, ordena y emite su juicio.
Felizmente, la mayoría de los uruguayos queremos lo mejor para los nuestros y no destacarnos diciendo lo peor, aunque sea mentira, con tal que hablen de las barbaridades que se escuchan, se ven o se leen.
Es una antiquísima manera de tratar de sobresalir, de hacerse ver, que los vean, que digan “ mirá quien va allá … es …”. Una vez lo escribí y reitero el título porque lo merece ante tanta imbecilidad acumulada.
Es … “la pobre gente”, don Florencio, nuestro querido periodista y dramaturgo. La que odia por odiar, la que envidia, la celosa, la falluta, la mentirosa. Esa gente que tan bien retrata en muchas de sus obras maestras Don Florencio Sánchez.
Y en lo nuestro, en el deporte, no podían faltar.
Pero, como dice Florencio Sánchez, al cierre de sus dos actos, de La Pobre Gente …”No es tan malo Dios … a pesar de todo.”
Recuérdelo.

lunes, 14 de septiembre de 2009

GRACIAS POR EL FUEGO

Escribe JORGE CROSA

El costo de la derrota es la despedida. No es novedad. Al técnico Ribas le ha sucedido por segunda vez en Peñarol. Si no se gana con un “grande”, si la campaña es mala, no tiene vuelta el asunto. Se sabe, fue, es y será así.
El mundo del fútbol y de cualquier deporte así lo marca. Se va, siempre el responsable técnico. En la pelota de todos los domingos, en el basquetbol, en el volebol, en el rugby, en cualquier disciplina colectiva, se paga el costo de ser el director de la orquesta. Desafina. Afuera. Gracias por el fuego …(querido Marido Benedetti, siempre presente para cualquier escritor, por su vigencia, por su tarea formidable y justo con ésta novela que tiene como motivo guía, el de la frustración). Y hoy, 14 de setiembre, que cumpliría 89 años, el laureado autor nacido en Paso de los Toros, Tacuarembó, jornada en la que se crea su Fundación.
Y es así, nomás. Se llame como se llame el técnico en éste asunto del fútbol.
Recuerdo renuncias como las de Mourinho, Capello, por citar, con cifras “galácticas” por su despido y ¿todo por qué?, porque con los grandes equipos hay que ganar.
Siempre o con una frecuencia casi infalible. Perder no está en los cálculos de ningún dirigente, de ningún hincha, de nadie que se sienta consustanciado con la causa de un enorme grupo, histórico, como Peñarol o Nacional.
Es una obligación. Sin ese “brevet” (diploma) de vencedor, no se aguantan ni los partidarios, ni los dirigentes, ni los propios jugadores, que también tienen su cuota parte en éste negocio, claro está, ni nadie que vea la caída vertical, sin levante, de un equipo de fútbol con un fantástico palmarés.
Todos “pagan” ese precio de perder con Peñarol. Con Nacional. Y ya que estamos, mire a los vecinos, nomás. El Coco Basile a los tumbos con Boca, campeón de todo y pierde a cada rato. Gorosito que no sabe lo que hacer con River Plate, millonario por donde lo busque, menos en los resultados. El propio genio Maradona, que se tomó el avión para decirle cara a cara a los “de allá” que es lo que “pasa acá” que no rinden y por ahí agradecerles los servicios prestados.
Por lo tanto, en todos lados, el resultado, el juego, la manera de presentar el equipo, si no se gana, no es nuevo, es más viejo que el piripicho de las globas de hace 40 años, que hay ponerse el bolso al hombro, saludar y a otra cosa, che pebeta …
Mala suerte, no salieron las cosas, no se pudo conformar el grupo, se pierde y no hay juego colectivo, no se llega al gol, se pierde y no va la cosa, entonces, la historia marca el adiós de los técnicos. Como se llamen. Con los títulos que tengan. No importa. No ganan. Afuera. Así de fiero es el deporte. No te da chance.
Revancha sí. También es cierto.
“No hay partido sin revancha”, se sabe.
Venga quien venga, Peñarol, como grande, tiene que regresar a la victoria, porque su gente se lo reclama. Es así y siempre será así.
Y si no gana, pasará lo mismo. Otra historia, repetida, de fracasos y broncas. Los grandes no soportan toboganes. Ni Peñarol, ni Nacional, ni Boca, ni River Plate, ni Barcelona, ni el Real, ninguno, por algo son grandes, por sus éxitos permanentes, sin claudicaciones.
Y cuando eso no se logra, adiós. Así es. Para todos, sin excepción.
Culmina una etapa frustrante. Le duele a cualquier deportista, por supuesto. El fútbol sigue.
Gracias por el fuego …
Esta vez, no pudo ser.

jueves, 10 de septiembre de 2009

"A CORAZON PARTIDO ..."

Escribe JORGE CROSA

Antes de Colombia, escribimos que se “rompieran el corazón” y ganar los tres partidos que quedaban. Cumplieron con la primera meta volante del camino. El mojón Colombia se pasó. Sin lujos, (no es nuestra característica), con fuerza y una voluntad que dio, nuevamente, a nuestra gente, la sensación que no está todo perdido.
Así fue contra los colombianos. A “corazón partido”. Con apellidos conocidos, pero distintos en su puesta en acción. De allí la formación con Silva, Valdéz, Cáceres y Pereira, Pérez y Gargano, Cavani (media hora) luego la fuerza de Andrés Scotti con gol incluído, Cristián Rodríguez, Suárez y Forlán en una tarea diferente. Accionó como distribuidor y centralizador de avances, de pases, de coordinación.
El gol de Suárez, a los 6 minutos, fue una inyección de vida, la expulsión de Valdéz, un dudoso apurón del árbitro Torres, aunque debe reconocerse que ese tipo de jugadas al límite, tan temprano, media horita nomás, no fue acertada, aunque no era para roja, sin duda, pero, como que uno “se regala”, ¿no? . Una pena.
Después Torres “compensó” con la maldita tarjeta a Teófilo Gutiérrez. Le vino al pelo a la celeste, porque fue como “saliendo del vestuario” que quedamos los dos con diez, la ventaja y el aliento increíble de nuestra gente que, más allá del 2 x 1, tipo oferta de supermercado, creía en Uruguay, como lo demostró.

UN EMPATE INESPERADO

Mientras prevalecía cierto dominio, desordenado, pero dominio al fin, vino el gol de Colombia. Un centro sin pena, las manos de Castillo que no superaron la altura de Jackson Martínez, la cabeza y llegó la paridad. Injusta, pero real.
A laburar de nuevo. Ellos con sus cambios tácticos realizados, Jackson Martínez y Giovanni Hernández y Uruguay con uno sólo, Andrés Scotti por Cavani.
¿Cómo encontrar la victoria? . “ A corazón partido”. Pereira por su sector dominando, Gargano recuperando, Cristian Rodríguez en la búsqueda continuada de la pelota, Suárez, sin descollar pero valiente, Diego Pérez con una entrega fantástica metió notable y sobre los 76’ , luego un tiro de esquina de Pereira, Scotti, con precisión la mandó adentro, lejos del golero Julio, que no se dio cuenta que estaba soberanamente fuera de distancia. Ese gol, que levantó a un pueblo, marcó la diferencia real.
Esto es, Colombia amedrentada, atrasada, con chispazos, sin peligro de cortocircuito y Uruguay al frente, con absoluta disposición, más allá del orden que se puede precisar. No era momento para fijarse en eso. Había que ganar.

Y SALIO EL PONCHO CON ESPIRITU INCLUIDO

No se le dejó pelota para dominar. Se trabó lo que se pudo. Era fundamental no dejarlos armar, aunque ya Colombia había resignado esa posibilidad, salvo alguna llegada de riesgo que consolidó Pereira, de gran juego y a seguir metiendo. Colombia vio un final oscuro. Porque Uruguay logró “apagarlo”.
Le sacó la pelota y metió fuerza, velocidad, marca y peligro. No mucho más, pero con eso era el partido.
No se dio pelota por perdida y Pereira, una vez más, con el poncho y una voluntad indomable, llegó por zurda, habilitó a Forlán, quien levantó la mirada y vio que venía Eguren por el medio, solito y en lugar de hacer una propia, cedió el pase al medio, para que, quien sustituyo a Rodríguez, la mandara “recomendada”, tipo carta, cuestión que llegue, ¿vio?, al fondo de la “casa colombiana” que cuidaba el “sereno” Agustín Julio.
Se cerró el sport. Uruguay 3 a 1. Victoria con satisfacción superlativa, luego de la penosa caída ante Perú. Remontada anímica fundamental.

EL CAMINO ES CULEBRERO …

Había que voltear tres mojones. Colombia, Ecuador y Argentina. No es sencillo el camino. Sin duda que es culebrero, como cantan los colombianos. “pero como me voy, yo me pongo mi sombrero …” . Un mojón quedó atrás. Ahora vienen “las de a peso”. Falta un mes. Pasará rápido, sin duda. Nada es sencillo para ningún equipo en las eliminatorias. Allí lo ven a Argentina, con todos sus millones y cayendo, “a lo Florencio”, Barranca abajo. Con los cracks incluídos y Maradona y el ruido y la prensa y el peso de Grondona y todo ese “plus” que siempre tienen. Y que siempre tendrán y han tenido. Queda claro.
Con distintos apellidos, los uruguayos supieron cumplir. No sin riesgo. No existe ganar sin peligro.
Vencer sin peligro es triunfar sin gloria.
Quedan dos rivales de jerarquía. Uno porque siempre ha sido complicado, aún en declive: Ecuador. El otro, bueno, el vecino no andará bien, será criticado, pero es el rival de toda la vida, junto con Brasil. Las eliminatorias son más graves que los mundiales, siempre ha sido así.

EL QUE TIENE FE EN SI MISMO …

Dolió lo de Perú. Mucho.
Se “partieron el corazón” contra Colombia. Ganaron. Muy bien.
Ahora, como uruguayo, deportista, periodista, o como cualquier habitante de ésta noble tierra oriental, vamos a pedirle a quien corresponda, creyente o no, que nos dé una mano, ¿por qué no?, no es desdoroso tener la fortuna de nuestro lado y agrego, como el escritor español Unamuno, que de algo vale el estudio y la ilustración:
“El que tiene fe en sí mismo, no necesita que los demás crean en él”.

domingo, 6 de septiembre de 2009

TELON LENTO ...

Escribe JORGE CROSA

Antes del partido dijimos que llegábamos al abismo por culpas propias.
Lo confirmamos. Lamentablemente, aunque sea muy cierto que faltaron elementos claves, se jugó mal. “No salió nada”, al decir de los protagonistas.
Y así fue, como empezó, tal cual obra de teatro a bajar el telón …lento.
De esas obras que te angustian, que te clavan un puñal en el zurdo y que te dejan, como supongo a los protagonistas, con un tremendo dolor deportivo. El alma en el piso. Esta pelea la estamos perdiendo desde muy lejos, round a round, la tarjeta de los jurados siempre nos da abajo y está bien. Porque estamos mal y jugamos así. Hacia abajo. “ No largamos las manos”, en la jerga pugilística. Sin poder de recuperación. Y no sólo hablo de ésta derrota insufrible contra Perú, que nos deja haciendo equilibrio, a milímetros del último paso, ése que no queremos dar, pero que está tan cerca, que solamente algo verdaderamente extraño, de esas cosas del fútbol, nos permita ganar los tres partidos que nos quedan y ubicarnos, acaso, en un punto de acceso a Sudáfrica.
¿Importa citar quien no rindió? , ¿ hacer un balance individual?. No. No vale la pena. El grupo sabe a la perfección todo lo que no pasó, entonces, a la gente …¿qué hay qué explicarle, si ya lo vio todo?
Y lo viene observando desde hace un buen tiempo.
No se trata aquí de juzgar el rendimiento personal, sino colectivo y todo un sistema que no fue útil, cosa que se destacó, de la misma manera que dijimos cuando nos gustó la celeste, en momentos decorosos, llamativos y válidos.
Si se jugó mal, se dice. Si bien, también. Es la ley del deporte. Es la obligación del periodista.
Esto no me gustó y no le ví vuelta al asunto. El desorden, el apuro, la urgencia de ganar, cambió el principal argumento que debía tener el equipo para vencer: paz.
Es muy fácil decirlo. Es muy difícil, en las condiciones en que se llegó, a concretarlo. La desorientación le gana por goleada al pensamiento, siempre.
Una cosa es jugar apurado, otra rápido. No fuimos el rival que Perú, un mediocre grupo, el que cierra la tabla, esperaba. Y nos venció. Y callado. Declaraciones habrá, explicaciones, no.
No se explican estas fallas continuadas. ¿Sabe lo que vale muchísimo más, aunque ya se diga que estamos afuera del mundial?
Que se rompan el corazón y ganen los tres partidos que les quedan. Y después que los números, los resultados de los demás digan donde quedamos, ya que, por las nuestras, no pudimos acceder al lugar que todo el país quería. Ver a Uruguay saludando en Carrasco rumbo a Sudáfrica.
Esa es la última acción deportiva que les queda a los celestes. Ninguna otra cosa. Nada de lamentos. ¿ Para qué? . No vale la pena.
Las “culpas propias” se hicieron presentes una vez más. Esto es fútbol. Ni enfermedad, ni hambre. Mutis y por el foro …
Telón lento …

miércoles, 2 de septiembre de 2009

CULPAS PROPIAS

Escribe JORGE CROSA

No conozco a nadie que pida culpas. No se cobra por acusar. Se sabe que el desmentido, va en letra chiquita, inleíble, o se escucha bien bajito o se dice en televisión, como campaña de expectativa. Cortito como para que no se entienda.
Ya no están ni Obdulio, ni Míguez, ni Schiaffino. También fueron criticados, por supuesto. Los uruguayos (estoy incluído, naturalmente) tenemos vocación de inconformistas. Y está bien. Cada cual es como es y si lo podemos decir, mejor. Es que, observando el tiempo que se nos viene, tipo anuncio meteorológico, el fútbol uruguayo, pasa a ser como el temporal de Santa Rosa. Vientos arrachados, lluvias, bajada violenta de temperatura, frío, rayos, centellas y demás fenómenos.
Es que se viene otro juego por las eliminatorias. Ese tema que no hemos resuelto aún, que desde hace mucho tiempo no sabemos la lección y que, lamentablemente, por culpas propias, estamos en la fila de los desconcertados.
De los opositores sistemáticos no me ocupo porque, antes de arrancar, ellos ya saben que el auto no tiene combustible. Acusan una rara combinación, o bien un entrevero mental, entre los que juegan, los que dirigen, los que emiten la señal, los que aplauden antes, obsecuentes hoy, detractores ayer, en fin, hay de todo en el temporal. Se caen árboles, cables, hay incendios y comentarios varios. Generalmente, la mayoría en contra de todo, porque a nadie le gusta el mal tiempo, por supuesto.
También he visto, quienes abren el paragüas, por si acaso. Y son esos mismos que, después, modifican sus críticas por elogios incomprendidos. Como para quedar bien, digamos. Claro que es mucho más sencillo ofender que evaluar, que está todo mal a consecuencia, invariablemente, de un factor. No sale de ahí la cosa. La culpa está designada. Dirigida. Es el misil que llega al mismo destino. Los enfoques de todo tipo, hasta políticos, ya que estamos en tiempo de elecciones, van en contra de la organización, del sistema, de los “arreglos”, de las componendas. Esto es, la misma melodía, con diferentes letras. Pero el tono no cambia.
Si se le gana a Perú, pero, ¿cómo no le íbamos a ganar si están “muertos”?. Si se pierde, “Agarrate Catalina” (atentos Yamandú, Tabaré Cardozo y demás muchachos, con saludos cordiales, claro está).
Culpas propias, dije. Y es cierto. Nadie nos ubicó en el abismo. Llegamos dando “pasitos cortos”, como puntero ligero en la milla de Maroñas. Entonces, en el momento de repartir responsabilidades, ni los micrófonos se salvan.
El responsable, así es la cosa, es el técnico. Hoy Tabárez, mañana Suárez, pasado Martínez. ¡Mire que no poner a fulano, mengano y …!. Siempre juega mejor el que no juega …
A los uruguayos nos encanta la polémica. Somos así. ¿ Y qué? . Hasta peleadores, somos, si se quiere. ¿ Y qué?.
Pues, entonces, lo que se debe saber es que no todos los que “están en el ómnibus”, piensan igual. ¿ Porqué no te bajás?, pensará el que se cree “el crack” de la película. Y la respuesta es: “No te subas, que no vas …”.
El “no estamos de acuerdo” es el lema. Si cambia la cosa , bueno, por ahí, hasta hay un intento de juntar las manos. Tipo aplauso, ¿vio?. Pero no es fija. No se juegue.
Culpas propias. Sí. Y no tiene vuelta el asunto. No se rindió cuando fue necesario. Ahora estamos en pleno temporal. Por ejemplo, lamentamos ausencias, pero igualmente, con respeto, no hay justificativo posible que me convenza que no le podemos ganar a Perú. No hay. Y lo saben los que se la juegan, los que andan taconeando en el túnel y quien dirige.
Bueno, es tiempo que nos demuestren que, si por culpas propias llegamos al precipicio, también por méritos propios, nos alejaremos del mismo.
Fui claro … ¿o va de nuevo?

lunes, 31 de agosto de 2009

DEPORTIVAMENTE INCORRECTA

Escribe JORGE CROSA

No fue necesario mirar la televisión para ver si el línea Gadea y el árbitro Aguirregaray tomaron una decisión “deportivamente incorrecta”. No. En el mismo momento que se produce la entrada de Rodríguez y atropella al golero García, se advirtió que podía pasar algo. Una tarjeta amarilla. Si era para Rodríguez era roja, porque ya venía con una amarilla. Si era para el golero por la “tocadita” de cabeza o gesto canchero, bueno, se admite una amarilla y una advertencia. Pero nada más. No supuso una jugada de alto riesgo, no hubo intención de quebrar a nadie y si de éste tipo de jugadas hablamos, en cada partido de nuestros torneos, si se emplea el mismo criterio, no termina ninguno. Todos quedan como Central Español, por ejemplo, con siete jugadores o bien finaliza porque reglamentariamente no se puede seguir con seis futbolistas.
No era para tanto. No fue para mostrarle la roja, es una interpretación personal, queda escrito, porque no “daba para tanto”. Entonces, cuando pasan estas cosas uno se replantea si el esfuerzo de los equipos, tanto del Interior, como de la capital, realmente vale la pena, cuando se juzga de ésta manera ciertamente incorrecta. Porque esta acción arbitral fue, sin duda, un error y como no tiene marcha atrás, así quedaron las cosas. Tacuarembó “regalado”, luego de plantearle un partido en serio a un Nacional con todas sus figuras, no entregándose nunca y dando la sensación que hasta le pudo meter un gol, de no ser por atajadas notables y desvíos de último momento de Rodrigo Muñóz, quien no esperaba, ni en sueños, la arremetida de la gente rojiblanca.
Pero esto hay que decirlo ahora, porque después la gente olvida. Es de memoria frágil el fútbol. Tampoco es para acusarlo por vida a Aguirregaray, pero hacerle notar que se equivocó, tanto Gadea, con su ojo “telemétrico” y la facilidad con que el juez mostró la indeseable tarjeta.
Para cualquier deportista, que siente el asunto, te tira al piso. Te desacomoda y te duele. Porque es injusto. Así lo observé y lo trato periodísticamente como corresponde.
Entonces, como el tema da para cientos de interpretaciones, uno se queda con la que entiende justa. Considerando que me puedo equivocar, por supuesto. Pero, no. No observé esa “intencionalidad” a la que recurren los jueces para determinar si tal acción es para amarilla o roja.
Una decisión que va más allá del partido, del gol de Nacional, diez minutos después, de la victoria y los puntos. No. Va directamente a la lucha de la gente del Interior, justo con el único departamento, en éste caso equipo, que comprendió hace ya muchísimos años lo que era el fútbol a nivel nacional como se planteó y cómo se está jugando.
Y ese equipo y esa gente es Tacuarembó. Los que se unieron, dejando de lado intereses clubistas para desarrollarse en el fútbol uruguayo.
Por eso es que lastima éste tipo de actitudes erróneas. Porque sea Tacuarembó o a quien le toque se hace daño al deporte. Comprendo que no sea premeditado, pero el perjuicio deportivo se hizo.
Y eso hay que decirlo ahora y siempre. Porque es verdad. Digan lo que digan o les guste o no a quien corresponda.

sábado, 29 de agosto de 2009

LA BESTIA NO MUERE

Escribe JORGE CROSA

Dio la impresión. Parecía. Era probable. Pero no.
La bestia no muere. Y me sugiere, de inmediato, el libro de novela negra del Séptimo Círculo, presentado sobre 1945, por Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares, con el título de Nicholas Blake: La bestia debe morir.
Pues no ha sido así. Es necesario, en este punto, una debida aclaración. En cuanto me refiero a “Bestia” es a la violencia, manifestada en todas sus acciones. En este caso, en singular, el retorno de los “Hooligans”, detestables personajes del mundo del fútbol, ingleses de los años 80, que herían y mataban en este deporte, cuando las cosas a su equipo no les iban bien. Drogados, alcoholizados al máximo, aplicaban el rigor de la muerte a los espectadores que concurrían a ver un juego y terminaban en un velatorio. El triste final era, en el fútbol inglés, una costumbre. Hasta que fueron sancionados por la propia Federación Inglesa y luego por la FIFA, prohibiéndoles por cinco años, todo tipo de participación internacional a los clubes y a la selección inglesa, incluyendo los campeonatos del mundo. Esto es, el adiós parcial de los ingleses en el mundo del fútbol, hasta cumplir esta condena.
Desde aquel momento hasta hace muy poquito, todo transcurría con la normalidad que los ingleses saben imponer a sus decisiones. Pero la bestia no muere. Está allí. Acechando y esperando el momento para agredir, para mostrarse tal cual es. La violencia regresó al fútbol inglés en un juego entre el West Ham y el Milwall, en el Upton Park, en donde fueron heridas más de 20 aficionados, se rompieron vidrios, se prendió fuego a los asientos del estadio y se arrojaron al campo. Hubo detenidos y esos trámites policiales de siempre.
Pero quedó claro que los años 80 revivieron como si no hubiese pasado nada. Como si aquella tragedia del estadio Heysel de Bruselas, cuando por la final de la Copa de Europa, entre el Juventus y el Liverpool, que cobró 39 muertos, no hubiera pasado. O reeditando los 93 muertos de la final de la Copa Inglesa entre el Nottingham Forest y el Liverpool, en 1989, en Sheffield, tampoco hubiese sucedido.
La bestia no muere. Está. Hay que incentivarla nomás. Darle un mínimo motivo para que reaparezca. Es por eso que no creemos, lamentablemente no creemos, que se detenga la violencia en el deporte. No por éste hecho aislado que vuelve a sacudir al mundo. No. Es porque es imposible detenerla, solamente con leyes y decretos. Acaso sea necesario algo más. Ningún violento,( potencial asesino) es tonto y sabe que si hay “algo fuerte” esperando a la violencia, ésta no llega. Está comprobado.
De allí que entre los dos títulos sugerentes del comentario, los dos se ajusten a la realidad.
La bestia no muere y la bestia debe morir.