DESGOBIERNO (PARTE ...?)

Escribe JORGE CROSA

Renunció Rivero. Peñarol no juega la Liguilla. La AUF no tiene Presidente. No usaremos la palabra crisis, urticantemente elegida para estos momentos, repetidos, del fútbol uruguayo. No. Usaremos desorientación, a ver, tampoco, ya tenemos. A ver, desolación, no, muy sofisticado. Otra, deterioro, no, ya se sabe. Hummm, confusión, desconcierto, caos, desbarajuste, barahunda, extraviado, impotencia, desamparado, ehhh, nos vamos a quedar con desgobierno.
Ahí está. Desgobierno. Desarreglo y alboroto. Todos tienen razón y ninguno la tiene. Eso es un desgobierno. En eso está la AUF. No se sabe por cuantas horas, días, semanas o se llamará a la Asamblea General, los clubes, para ser más claros y volverán a votar.
Ahí está, una vez más a votar el triste personaje que presentará renuncia (porque en esta obra ( cuasi teatral) el principal siempre renuncia, usted lo debe saber) desde tiempo inmemorial siempre, por un cosa o por otra, siempre se va el Presidente. Se fue fulano, mengano, zutano y perengano. Y así seguiremos los uruguayos. Renunciantes los designados y los no designados en la Asociación Uruguaya de Fútbol.
Igual se jugará la Liguilla y Peñarol, esta vez le tocó al aurinegro, como en anteriores oportunidades a Nacional, a Cerro, a Liverpool, a Defensor, a cualquiera, porque en este asunto de sentirse menoscabado, despreciado e irrespetado, no se salva ninguno.
Falla el sistema. Siempre falló, desde que existió una Junta Dirigente, allá por los años 50, cuando se festejó el Maracanazo, que hace 59 años, nada menos, ocurrió la hazaña, irrepetible e inigualable de los celestes.
Pero, hoy, como hace más o menos, cinco décadas, pasa esto. Lo provisorio es la realidad. Así se vive en el fútbol. De manera provisional.
No hay Presidente. No importa, parece. Se reúne la Asamblea, se designa a quienes después, no se sabe cuando pero se irán y los aplauden, no sin antes decirles que son personas de bien, intachables, que es cierto, por otra parte, pero como dirigentes de la AUF no funcionan.
Nadie funciona. Pero porque la AUF no tiene ese poder que, necesariamente, debe poseer y los clubes no lo permiten.
Entonces, nada. Seguirán levantando la mano, aprobando, desaprobando, votando, llegando, sentándose y yéndose los dirigentes de turno.
Lindo carguito el de neutral de la AUF, ¿eh?. Hay una especie de ridiculez emparentada con la ausencia neuronal en todo esto que da lástima. Realmente penoso.
Una vez más, la AUF, sin Presidente. A votar gente. Para echarlos o para que se vayan. Pero a designar otro Ejecutivo. Que no ejecuta porque no lo dejan y si lo hace, pasa esto. Se tienen que ir. Uno primero y los otros, por lógica, lo acompañan.
Ayer nomás escribimos LOST, título de la famosa serial de la isla, pensando que se llegaría a una solución. No. Peor. Se fue Rivero.
Como en la isla seguirán pasando cosas inesperadas, insospechadas, impensadas.
- Buenas tardes, llamo desde la Conmebol, por favor, me podría comunicar con el Presidente de la Asociación …
- No hay. Lo lamento. ¿En que lo puedo ayudar? …