jueves, 25 de junio de 2009

¿Y LA DUEÑA DEL SHOW?

Escribe JORGE CROSA

En este tema de las hinchadas, hay un error o bien una omisión que se debe señalar de la Confederación Sudamericana de Fútbol, organizadora de estos torneos, como todos los del continente.
Explico el porqué de inmediato. No existe una reglamentación que establezca un porcentaje o un número de venta de entradas en cualquier fase de la Libertadores, Sudamericana o Eliminatorias, para el equipo visitante.
Hace muchos años, Argentina nos quiso comprar toda la tribuna Amsterdam y uno de mis hijos, Guillermo, escribió con total claridad que el Estadio “tenía y debía ser celeste”.
Nada más lógico y coherente. Como no está reglamentado el tema, esto lo supongo, porque de lo contrario, esta situación de Estudiantes y Nacional no se hubiese presentado, en aquel momento, si podían, se venían 50.000 argentinos y el Centenario era “visitante”.
Ridículo, por donde se le mire. Absurdo, también, que se excluya al hincha del rival en el fútbol.
No es una cuestión de un acuerdo “ y deme 5.000 o no … 8.000 más o menos …”. No.
Esto, ya que aparece el tema y ya está jugada la carta, mal jugada para mí, es momento que la Conmebol intervenga en el tema o capaz que existe algún artículo al respecto y nadie ha dicho nada o se ha desconocido “olímpicamente”.
Lo cierto que el fútbol, de “entrecasa”, habiendo tanto en juego como las semifinales de la Libertadores parece un mal chiste. “Vos no vas porque sos del otro cuadro”. Razonamiento infantil, entre gente grande …
Aquí pierden todos. Los equipos, la organización, los jugadores, el hincha, fundamentalmente y se anota una grave ausencia reglamentaria. Y si ésta existe, es más grave aún, puesto que no se aplica.
No es “así nomás”, como se vio, ni con declaraciones acusatorias de quien tiene la culpa.
Hay un “agujero” y no en la capa de ozono. En la “carpa” de los “capos”. Los dirigentes. Los que cortan el viejo y querido “bacalao”, los que mandan y en ésta situación no los he visto intervenir, porque, se trata, dirán “ de una cuestión de común acuerdo entre los clubes”.
Como ese”común acuerdo” no existió se perjudican los hinchas de uno y otro equipo.
Ahora no hay tiempo de nada, lógico. Pero sería oportuno que interviniese la Conmebol, en estos casos para decidir qué se hace y como se hace, al no llegar a una solución los directivos de los clubes participantes en estas instancias.
Un elemento que regule que, en tales situaciones, el número de entradas para el equipo visitante, sea donde sea, será de “tantas localidades”.
Y a otra cosa, che pebeta. Ya se vio que no se puede dejar librado a un “arreglo de partes”, porque éste no existe. La Conmebol es la dueña del show. Debe legislar.
Por una cuestión de respeto. Porque al hincha hay que permitirle lo que le corresponde, esto debería articularse en algún sector de la Confederación.
Con “entradas familiares” no se arregla el asunto. Además de ser totalmente incongruente.